El calentamiento global también nos arrebatará el sueño, encuentra estudio
Debido al calentamiento global, la apnea del sueño se volverá más frecuente y grave, señala un estudio publicado en la revista Nature Communication y realizado por expertos del sueño de la Universidad de Flinders.
La apnea del sueño es una enfermedad que altera la respiración durante el sueño. Las personas que la padecen experimentan pausas respiratorias que duran desde segundos hasta minutos, repitiéndose varias veces en una misma noche, interrumpiendo el descanso reparador. Con el tiempo, el problema aumenta el riesgo de desarrollar problemas de salud más graves como hipertensión o enfermedades cardíacas.
Diversos factores aumentan el riesgo de padecer apnea del sueño como obesidad, edad avanzada o consumo de alcohol o sedantes. Ahora también se deberá considerar el aumento de la temperatura promedio de la noche derivado del calentamiento global. Noches más calurosas incrementan la gravedad de la apnea obstructiva del sueño (AOS) y, según los resultados del estudio, en 75 años, es probable que los casos se dupliquen en la mayoría de los países.
Más calor, más probabilidades de apnea de sueño
El estudio realizado por investigadores australianos evalúo la calidad del sueño de 116,620 personas de 29 países, durante 3.5 años, a través de un dispositivo de respiración autónoma y sensores en sus camas. Paralelamente, los investigadores compararon estos datos con información detallada de temperatura obtenida a partir de modelos climáticos.
Aunque es bien conocida la vinculación entre noches calurosas con sueños poco reparadores, hasta ahora no se había analizado el impacto específico sobre la gravedad de la apnea del sueño. El reporte resalta que las temperaturas más altas se asociaron con un aumento del 45% en la probabilidad de que una persona experimentara AOS en una noche. “Nos sorprendió la magnitud de la asociación entre la temperatura ambiente y la gravedad de la AOS”, dijo Bastien Lechat, primer autor del estudio.
Con estos resultados fue posible hacer una extrapolación del costo de la apnea del sueño en términos de bienestar social. El incremento en la prevalencia de AOS relacionado con el calentamiento global se asoció con la pérdida de 800,000 años de vida saludable en los 29 países analizados. Este costo sitúa a la apnea del sueño a la par de afecciones como la enfermedad de Parkinson y el trastorno bipolar.
El estudio se centró en países desarrollados y en participantes con un nivel socioeconómico alto, quienes estadísticamente tienen más acceso a entornos favorables para dormir. Sin embargo, investigaciones independientes han señalado que el calentamiento global impacta más en países subdesarrollados y a comunidades vulnerables. «Esto puede haber sesgado nuestras estimaciones y llevado a una subestimación del verdadero costo económico y de salud”, acepta Danny Eckert, otro autor del artículo.
De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud, las personas adultas deberían dormir entre siete y nueve horas cada noche, mientras que los niños de cero a cuatro años necesitan descansar entre 10 y 14 horas, aproximadamente. La apnea del sueño puede afectar a personas de cualquier edad, aunque el riesgo aumenta considerablemente en adultos mayores de 60 años.