Los delfines ‘sonríen’ al jugar con sus amigos, indica una nueva investigación
Los delfines mulares o ‘nariz de botella’ son conocidos por su naturaleza juguetona y su comportamiento dinámico. Hasta ahora se sabía poco sobre la comunicación de los delfines mientras jugaban, pero una nueva investigación encabezada por Elisabetta Palagi, bióloga evolutiva de la Universidad de Pisa en Italia, revela que el acto de abrir la boca y mostrar una expresión similar a una sonrisa tiene para estos animales un significado social.
¿Qué analizó el equipo?
Palagi y sus colegas observaron el comportamiento de ejemplares en cautiverio y registraron su expresiones faciales mientras jugaban solos, entre ellos y con cuidadores humanos. Descubrieron que estos animales abren la boca y sonríen solo cuando juegan con sus amigos. «Los delfines mulares utilizan expresiones faciales específicas para comunicarse e incluso tienen la capacidad de imitar los gestos de otros delfines», se lee en el reporte publicado en la revista Cell.
Hallaron que de las 1,288 veces que los delfines mulares sonreían, el 92% lo hacían cuando jugaban entre ellos. Estos cetáceos rara vez gesticulaban en presencia de cuidadores humanos o cuando se entretenían solos. Esto sugiere que la información visual es fundamental a la hora de comunicarse socialmente.
Un signo particular de alegría
El comportamiento de enviar e imitar señales abriendo la boca se ha observado muchas veces en todos los mamíferos, no solo en los delfines. Según Palagi, la comunicación visual juega un papel vital en la formación de interacciones sociales complejas: «Se cree que la expresión de risa con la boca abierta de los mamíferos se origina en los movimientos faciales que realizan al morder». A medida que los animales se volvieron más sociables, el acto de abrir la boca para transmitir su intención de morder pasó a funcionar no solo como un signo de agresión sino también como un gesto de felicidad.
«La expresión suave que muestran los humanos y los monos evolucionó como un medio importante para evitar malentendidos y conflictos con los demás», detalla Palagi. El equipo refiere que los mulares no solo realizan movimientos acrobáticos y montan olas; cuando juegan y se persiguen entre dos o más, sonríen el 89% del tiempo. Si un delfín ve una sonrisa en el rostro de su compañero, responde con la misma expresión aproximadamente el 33% de las veces.
Aunque algunos investigadores sugieren que imitar las expresiones faciales de los demás es “una coincidencia más que un tipo específico de comunicación”, Palagi defiende que estos animales tienen 13 veces más probabilidades de sonreír al segundo de ver la sonrisa de su igual, sugiriendo que esta gesticulación es parte de la comunicación visual y no un ‘comportamiento accidental’. Esta tasa de imitación también es consistente con observaciones de otros carnívoros, como suricatas y osos malayos.