Tres cuartas partes del mundo ahora son permanentemente secas: ONU
De acuerdo con la ONU, el 77.6% de la superficie de la Tierra se ha vuelto más seca en los últimos 30 años, desde 1990 hasta 2020, en comparación con el mismo período anterior, de 1960 a 1990. El informe de la Convención de las Naciones Unidas de Lucha contra la Desertificación (UNCCD), contrasta con la percepción generalizada sobre los desastres naturales que predominan en la actualidad, que están relacionados con agua.
El análisis científico de la UNCCD menciona que tres cuartas partes del mundo se volvieron permanentemente más secas. En tres décadas, las tierras secas se expandieron 4.3 millones de kilómetros cuadrados (km2). El planeta ha ganado una porción de área seca equivalente a un país como India, cuya superficie está calculada en 3.2 millones de km2.
El 7.6% de las tierras fueron desplazadas a través de los umbrales de aridez. En otras palabras, áreas que eran paisajes húmedos se volvieron secos y aquellas que ya eran secas se volvieron áridas. El informe señala que este cambio se debió a las técnicas de agricultura que agotaron el ecosistema y a la explotación de las zonas por seres humanos. Si esto continúa de la misma forma, para antes de concluir el siglo XXI, el 3% de las zonas húmedas pasarán a ser áridas.
Sequía en el mundo
La aridez no debe confundirse con la sequía. Esta última es una etapa por los que atraviesa un sitio y que, a largo plazo, no afecta a su ecosistema. La aridez, en cambio, es una transformación permanente donde el terreno pierde la capacidad de volver a las condiciones anteriores.
En el informe presentado en la décimo sexta reunión de la UNCCD celebrada en Arabía Saudita, el secretario ejecutivo Ibrahim Thiaw, aseguró que este es el primer esfuerzo científico para documentar con claridad la crisis de aridez en el planeta. Las zonas especialmente afectadas por la tendencia de sequía incluyen el 95.9% la tierra de Europa, el oeste de Estados Unidos, Brasil Asia Oriental y África central. Las zonas ahora presentan tendencias significativas a la sequía, con proliferación de incendios forestales y la degradación de la tierra relacionada con la aridez (desertificación).
La actual cobertura de zonas áridas supone la afectación de, al menos, 2,300 millones de personas. La UNCCD incluso se refiere a esta condición como “la nueva normalidad que requiere soluciones duraderas y adaptables”. Si el planeta sigue aumentando su temperatura global tal como lo ha hecho hasta ahora, hasta 5,000 millones de personas deberán vivir en sitios con tierras secas a finales de siglo. Esto supone lidiar con suelos agotados, recursos hídricos escasos y el colapso de ecosistemas prósperos.
“La tendencia general es clara: las tierras secas se están expandiendo, empujando a los ecosistemas y a las sociedades a sufrir los impactos mortales de la aridez”, señala un comunicado de la ONU.
Este informe marca un punto de inflexión en la medición de la aridez de los ecosistemas. Aprovecha modelos climáticos avanzados y metodologías estandarizadas para ofrecer una evaluación definitiva de las tendencias mundiales de secado.
“Durante décadas, los científicos del mundo han señalado que nuestras crecientes emisiones de gases de efecto invernadero están detrás del calentamiento global. Ahora, por primera vez, un organismo científico de la ONU advierte que la quema de combustibles fósiles también está causando un secado permanente en gran parte del mundo, con impactos potencialmente catastróficos que afectan el acceso al agua y que podrían empujar a las personas y la naturaleza aún más cerca de puntos de inflexión desastrosos”, dijó Barron Orr, jefe científico de la UNCCD.