Las estrellas que se codearon con los tiranos de Cuba
CDMX.- Mientras el pueblo cubano sufría décadas de represión, censura y miseria bajo la dictadura de Fidel Castro, varias celebridades de Hollywood se mostraban encantadas de visitar la isla y reunirse con el dictador.
Lejos de denunciar las violaciones de derechos humanos en Cuba, muchas de estas figuras se dejaron seducir por la propaganda del régimen, posando sonrientes junto al tirano y repitiendo su narrativa. Aquí algunos de los casos más sonados:
Jack Nicholson: el actor que llamó “genio” a un dictador
El actor estadounidense visitó Cuba en 1998 y, según informes de un exagente de inteligencia cubano, fue espiado por la Seguridad del Estado junto con Leonardo DiCaprio. Sin embargo, Nicholson pareció quedar fascinado con Castro, a quien calificó como “un genio” tras su encuentro.
Steven Spielberg: visita al régimen sin mencionar la censura
En 2002, el director de cine aceptó una invitación del Instituto de Cine de Cuba y se reunió con Castro en una cena de varias horas. A pesar de ser un hombre del mundo del cine, Spielberg no hizo referencia alguna a la censura brutal impuesta por el régimen cubano a los artistas y creadores de la isla.
Kevin Costner: una reunión de siete horas con el tirano
El actor visitó Cuba en 2001 para una proyección privada de su película “Trece días”, sobre la crisis de los misiles. Durante su estancia, se reunió con Castro en un encuentro que duró siete horas. Costner calificó la experiencia como “única en la vida”, sin mencionar la represión que sufría el pueblo cubano. Este mes, el famoso actor regresó a Cuba y se entrevistó con Miguel Díaz-Canel para continuar su tradición de entrevistarse con tiranos.
Oliver Stone: propaganda disfrazada de documental
El director realizó en 2003 el documental “Comandante”, una pieza propagandística que mostraba a Castro como un líder benevolente y visionario. Stone llegó a decir que Castro era “uno de los hombres más sabios del mundo” y que lo consideraba “desinteresado y moral”. No sorprendió que, poco después, el régimen le concediera acceso para realizar otro documental.
Naomi Campbell: deslumbrada por su “esperiritualidad”
La supermodelo británica, junto a Kate Moss, viajó a Cuba en 1999 y se mostró extasiada tras conocer a Castro. “Estoy tan nerviosa y aturdida porque no puedo creer haberlo conocido. Dijo que vernos en persona fue muy espiritual”, declaró Campbell. Mientras tanto, las cubanas de a pie luchaban cada día para encontrar productos básicos como leche o jabón.
Robert Redford: homenajeando al Che Guevara
En 2004, Redford viajó a Cuba para una proyección privada de “Diarios de motocicleta”, la película sobre el Che Guevara, un personaje clave en la maquinaria represiva del régimen. En su visita, se reunió con Castro y, lejos de criticar la brutalidad del régimen, se limitó a hablar de cine.
Danny Glover: el fan incondicional de Fidel
Si hay una estrella de Hollywood que nunca ocultó su admiración por Castro, ese es Danny Glover. El actor no solo visitó la isla en múltiples ocasiones, sino que incluso viajó a Cuba después de la muerte del dictador para rendir homenaje en su tumba. Con Díaz-Canel ha repetido la misma fórmula.
Harry Belafonte: un cantante al servicio del castrismo
El músico y actor de origen jamaicano fue un ferviente defensor del régimen y llegó a declarar: “Si crees en la libertad, la justicia y la democracia, no tienes más remedio que apoyar a Fidel Castro”. Una frase irónica, considerando que el pueblo cubano nunca pudo elegir democráticamente a sus gobernantes.
En el mundo del deporte también algunos simpatizaron con Castro:
Diego Maradona: tatuado con la imagen de un opresor
El futbolista argentino idolatraba a Castro y lo visitó en múltiples ocasiones. Llevaba un tatuaje del dictador en su pierna izquierda y lo describía como “un segundo padre”. Ha trascendido que Castro conocía que su “hijo” sostenía relaciones sexuales con una adolescente cubana.
Muhammad Ali: otro icono que cayó en la trampa
El legendario boxeador visitó Cuba y se reunió con Castro en varias ocasiones. Como muchas otras figuras, fue utilizado por el régimen para proyectar una imagen positiva ante el mundo, mientras los cubanos seguían atrapados en una dictadura que controlaba cada aspecto de sus vidas.
El dictador puesto a dedo
Si alguna vez alguien pensó que la fascinación de Hollywood por los dictadores cubanos terminaría con la muerte de Fidel Castro, estaba muy equivocado. La élite del entretenimiento no solo ha mantenido su romance con la tiranía, sino que ha extendido la alfombra roja para recibir al heredero designado, Miguel Díaz-Canel.
En 2015, mientras en Cuba seguían las detenciones arbitrarias, la censura y la represión contra opositores, Díaz-Canel fue recibido en Nueva York como si fuera una celebridad más. En una exclusiva reunión en el emblemático edificio Dakota, el actor Robert De Niro y la directora del Festival de Cine Tribeca, Jane Rosenthal, reunieron a un selecto grupo de artistas, filántropos y promotores culturales estadounidenses para agasajar al dictador cubano.
De Niro, deslumbrado como tantos otros, no tuvo reparos en lanzar frases poéticas en honor al régimen: “Los buenos vecinos no levantan muros, que la cultura sirva para construir puentes”. Palabras inspiradoras… si no vinieran de alguien que recibe con honores al representante de un gobierno que encarcela a periodistas y artistas por expresar sus ideas.
Las celebridades que saludaron al nuevo dictador
La lista de famosos que se reunieron con Díaz-Canel incluye nombres que, paradójicamente, en sus propios países defienden la justicia social y los derechos humanos, pero que al parecer deciden ignorar esas causas cuando se trata de Cuba. Entre los presentes estaban:
- Harry Belafonte, el eterno defensor del régimen castrista, que ya había mostrado su admiración por Fidel Castro.
- Patti Smith,cantante
- Dakota Johnson, protagonista de 50 sombras de Grey
- Chris Martin, líder de Coldplay.
- Katie Holmes, actriz.
- Paula Weinstein, productora y figura influyente en la industria del cine.
Ana de Armas, un caso especial
Pero si de conexiones entre Hollywood y la dictadura cubana se trata, hay un caso que merece especial mención: Ana de Armas, la estrella cubano-española que ha conquistado la industria del cine, es pareja de Manuel Anido, el hijastro de Díaz-Canel.
Sí, el gobernante cubano tiene vínculos familiares con la actriz que ha sido Marilyn Monroe en la gran pantalla.
Así que, mientras en Cuba los jóvenes son reprimidos por cantar sobre libertad o llevados a prisión como Maykel Castillo, la estrella de Blonde bien podría estar disfrutando de cenas familiares con el régimen. Después de todo, es de suponer que en casa de los Díaz-Canel la conversación fluya entre el glamour de Hollywood y la retórica comunista.