Así viven dos de las madres que se presentaron en la residencia de Díaz-Canel
Dos hermanas cubanas, madres de cinco menores, sobreviven en condiciones extremas en un cuarto improvisado de madera en La Habana; sin respuesta institucional.
LA HABANA, Cuba.- Hacinadas en un pequeño cuarto de madera viven con su madre y sus cinco hijos Xionimay Valdés Rivero y Yamila Valdés Rivero, dos de las tres madres cubanas que se presentaron en la residencia del gobernante cubano Miguel Díaz-Canel el pasado fin de semana.
Hasta la calle 126 entre 27 y 27D, en la barriada de Zamora, donde residen las dos jóvenes, llegó un equipo de CubaNet que conversó con su madre Taimí Valdés Rivero, quien contó y mostró las terribles condiciones de vivienda que enfrenta el núcleo familiar, conformado por cinco niños y tres mujeres.
La mujer aseguró que procede de una familia disfuncional que la echó a la calle con sus dos hijas cuando apenas tenían cuatro y cinco años.
“Mi madre padece de esquizofrenia paranoica y le gusta vivir sola… tuve que construirme un cuartico de madera en el patio y meterme ahí con mis hijas. Por cierto, estuvimos un buen tiempo sin techo”, contó.
Desde entonces comenzó a pedir ayuda a varias instituciones del Estado como: Atención a la Población del Consejo de Estado, Dirección Municipal de Vivienda de Marianao, Delegada de su Circunscripción “y nadie me ha resuelto nada y ya llevo una pila de años en esto”, precisó.
Asimismo, Taimí detalla que aquel “cuartucho de madera” que construyó con esfuerzo propio se desplomó y que tuvo que construir, con ayuda de otras personas, el que actualmente habita que no cuenta con las mínimas condiciones para vivir.
El pequeño inmueble es completamente de madera con piso de tierra pues fue levantado en lo que fuera el patio de la vivienda de su madre.
“Cuando llueve, llueve más adentro que afuera, y como esto era un patio el agua de la zanja que hay detrás entra y esto se inunda y el agua nos da por encima de los tobillos”, lamentó.
El pasado fin de semana sus dos hijas, acompañadas de otra madre cubana, se presentaron en la residencia de Díaz-Canel en aras de plantearle las condiciones en que viven y en busca de una solución a su situación de vivienda.
Las mujeres fueron interceptadas por la Seguridad del gobernante y un auto policial, quienes las conminaron a presentar su queja en el departamento de Atención a la Población del Consejo de Estado de acuerdo con el testimonio de una de ellas.
“Parece que era un escolta de él (Díaz-Canel) y dijo que estaba de descanso, que esa era su casa de descanso y que ahí nadie puede ir, que a donde teníamos que ir era a la Plaza de la Revolución y viró su espalda y se fue”, explicó Yamila Valdés Rivero, y aseguró que fueron en busca de ayuda, pero ni siquiera fue escuchada.