ARC expone pruebas sobre mercenarios cubanos en Ucrania
Gutiérrez-Boronat, Secretario de la ACR, señaló que los tres mercenarios solicitaron enviar un mensaje a sus familias en Cuba para confirmar que están vivos y fuera de peligro.
MIAMI.-La Asamblea de la Resistencia Cubana (ARC) presentó este lunes en Miami los resultados del reciente viaje de su secretario general, Orlando Gutiérrez-Boronat, a Ucrania, donde sostuvo encuentros con tres cubanos capturados mientras combatían en las filas del ejército ruso. Los prisioneros —Ernesto Michel Pérez Arbeláez, Frank Darío Jarrosay Manfuga y Yusbel González Tuercos— permanecen bajo custodia de las autoridades ucranianas y, según aseguró el opositor, reciben un trato “con respeto y humanidad”.
Gutiérrez-Boronat señaló que los tres solicitaron enviar un mensaje a sus familias en Cuba para confirmar que están vivos y fuera de peligro, aunque afirmó que han sido “testigos de los horrores que Rusia ha desatado contra el pueblo ucraniano”. El encuentro fue grabado en video y será difundido próximamente a los medios de comunicación.
Durante la conferencia de prensa, el líder de la ARC aseguró que existen “evidencias sólidas” de la participación del régimen cubano en el reclutamiento de ciudadanos enviados a combatir en Ucrania. Según dijo, se trata de una operación supervisada por la inteligencia castrista desde el momento en que los reclutados salen de Cuba hasta su llegada a territorio ruso. Estos hallazgos formarán parte de un informe que será remitido a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos.
El opositor indicó que a cada combatiente le serían pagados alrededor de 2.000 dólares y que las redes de reclutamiento también operan en países de Sudamérica. Añadió además que grupos guerrilleros colombianos participan del conflicto para adquirir “experiencia militar moderna” antes de regresar a su país. Aseguró estar “convencido, con base en las investigaciones de las autoridades ucranianas, de que el régimen cubano recibe dinero de Rusia”, en el marco de una colaboración militar que —dijo— se remonta a los años de la Guerra Fría. “Con esto se comprueba que La Habana no actúa como un simple observador, sino como un socio activo en la maquinaria de guerra rusa”, afirmó.
“El régimen cubano está recibiendo un bono por cada mercenario”. aseguró
Gutiérrez-Boronat remarcó que el voto reciente de Ucrania en las Naciones Unidas contra el régimen cubano tuvo “todo el respaldo del exilio cubano” y lo calificó como “una victoria en la búsqueda de una Cuba libre”. También destacó la relevancia de que Europa respalde al pueblo cubano y no continué con el Acuerdo de Diálogo Político y Cooperación del que se aprovecha la dictadura de la isla.
“Estamos en una nueva etapa por la libertad de Cuba, y al exilio le pido paciencia porque esta lucha es nuestra y tenemos un gobierno americano que respalda nuestra labor”, enfatizó.
En cuanto al futuro de los prisioneros cubanos en Ucrania, Gutiérrez-Boronat explicó que, debido al estado de guerra, Kiev no puede precisar su destino final, aunque garantizó que “no serán objeto de pena de muerte”. No obstante, recalcó que deberán enfrentar procesos judiciales.
En el mismo encuentro, René Bolio, presidente de la Comisión Justicia Cuba, exigió a la comunidad internacional investigar la responsabilidad penal del régimen cubano, los reclutadores civiles y los operadores internacionales involucrados en la trata de personas.
Cuba: el país que más mercenarios envía a Rusia
El pasado 18 de septiembre pasado, el congresista Mario Díaz-Balart encabezó una sesión informativa virtual sobre seguridad nacional. Allí, asesores del Gobierno ucraniano y legisladores de Kiev aseguraron que unos 20.000 ciudadanos cubanos habrían sido reclutados por Rusia para combatir en la invasión. El asesor presidencial Vladyslav Vlasyuk precisó que Ucrania ha identificado físicamente a más de mil de esos combatientes y que al menos 250 contratos habrían vencido sin que los reclutados fueran liberados. También confirmó que el salario promedio ofrecido asciende a 2.000 dólares mensuales y que la edad media de los participantes es de 35 años. “En promedio mueren entre 140 y 150 días después de firmar el contrato; el período más corto conocido es de siete días”, añadió.
Durante la sesión se presentaron documentos que, según las autoridades ucranianas, evidencian el funcionamiento de estas redes. Entre ellos figuran quejas de familias cubanas ante instancias rusas por desapariciones, impagos y retención forzosa tras el vencimiento de contratos. Se mencionó el caso de una mujer cubana contratada por 195.000 rublos mensuales, así como un proceso penal en Rusia contra la reclutadora Yelena Smirnova, acusada de defraudar los salarios de entre 300 y 400 cubanos. También se mostraron cartas de reclutados que denunciaban impagos y la imposibilidad de abandonar unidades militares desplegadas en Crimea.
Oleksandr Merezhko, presidente de la Comisión de Relaciones Exteriores del Parlamento ucraniano e integrante del Caucus Free Cuba, situó el fenómeno dentro de lo que calificó como “el eje del mal”, compuesto —según él— por regímenes autoritarios aliados. “El régimen de Castro en Cuba desempeña un papel especial en América Latina”, afirmó, y sostuvo que quienes auxilian a Rusia “deben ser considerados cómplices de los crímenes de guerra cometidos por Moscú”. Merezhko adelantó que impulsará ante instancias europeas el reconocimiento del régimen cubano como “un régimen terrorista”.
