La estrategia del ministro de energía frente a los apagones
MADRID, España.- Este miércoles 4 de septiembre, el programa oficialista Mesa Redonda estuvo dedicado a la crisis energética en Cuba, un tema que afecta a millones de cubanos diariamente debido a los constantes apagones que azotan al país. A la emisión asistieron Vicente de la O Levy, ministro de Energía y Minas, y Rosell Guerra Campaña, director de Energía Renovable del mismo ministerio, quienes ofrecieron “explicaciones” y “soluciones” a la problemática. Sin embargo, lejos de calmar las inquietudes de la población, las declaraciones del ministro han sido motivo de burla e indignación en las redes sociales.
Durante su intervención, De la O Levy intentó justificar los prolongados apagones que padecen los cubanos, haciendo referencia a los mantenimientos de las obsoletas termoeléctricas, y que, según sus palabras, se realizaron con los recursos disponibles en el país. El ministro dijo que los cortes de electricidad durante estos mantenimientos estaban previstos, ya que el país no cuenta con unidades de reserva suficientes para evitar afectar a la población. “Esos mantenimientos preveían unas cuatro horas de afectación porque no tenemos unidades de reservas para la generación”, afirmó, una declaración que no trajo nada nuevo a los cubanos, quienes llevan años sufriendo las consecuencias de la ineficiencia del sistema energético.
Según el ministro, muchas unidades tienen “limitaciones” importantes, y citó como ejemplo una unidad de 100 MW que actualmente solo genera entre 70 y 80 megavatios. Sumado a ello, De la O Levy explicó que el déficit energético del país ronda los 400 MW, una cifra alarmante atribuida a los años de explotación y la falta de piezas de repuesto. Asimismo, reconoció que los mantenimientos realizados solo permiten “mantenerlas vivas” pero no lograr que funcionen en óptimas condiciones. Este tipo de explicaciones, plagadas de ambigüedades, solo profundizan el escepticismo de una población agotada.
Lo que realmente encendió la indignación y las burlas en las redes sociales fue la siguiente declaración del ministro: “Nosotros estamos convencidos de que en un momento del año que viene, con la introducción de las energías renovables, con el otro crecimiento que va a tener el gas y con las reparaciones que estamos haciendo en las unidades térmicas… al menos vamos a tener un minuto del año que viene donde no vamos a consumir combustible importado… Y será el primer minuto. Ese minuto, la meta y la misión es empezar a engordarlo”.
El ridículo optimismo del ministro, al hablar de “engordar un minuto”, está generando una oleada de comentarios sarcásticos y memes. “Sí, todo lo que tenga que ver con engordar funciona en ciertos lugares”, escribió un usuario, mientras que otro ironizaba: “Un gran logro: ¡un minuto sin combustible importado! ¿Hay que aplaudir?”. Las críticas no se hicieron esperar, y muchos cubanos consideraron estas palabras como una burla más de las autoridades hacia una población que lleva décadas soportando crisis tras crisis. “Esta gente se burla del ciudadano común”, sentenció otro internauta.
Por su parte, la presentadora del programa y una de las voceras del gobernante Miguel Díaz-Canel, Arleen Rodríguez, tampoco escapó del ojo crítico de los cubanos. En medio del debate, Rodríguez pidió “aguantar un poquito más”, una frase que cayó como una bofetada a una población exasperada por los apagones constantes. Para muchos, la actitud de Rodríguez es “cínica”, ya que, como apuntan varios comentarios, ella no forma parte del elevado porcentaje de cubanos que sufre los apagones. “Arleen no tengas la cara dura… que tú jamás has aguantado ni una hora de apagón”, es uno de los tantos comentarios que circulan en las redes.
Las declaraciones del ministro y el tono del programa no hicieron más que evidenciar la desconexión entre las autoridades cubanas y la realidad que vive el pueblo. Mientras las soluciones propuestas parecen un ejercicio de retórica vacía, la población sigue soportando las consecuencias de un sistema energético en decadencia, sin visos de mejoría.