¿Cómo elige tu cuerpo si debe estornudar o toser?
Un grupo de científicos ha identificado las células nerviosas responsables de provocar estornudos en personas alérgicas. Las denominaron “neuronas del estornudo” y tienen una vía directa y exclusiva hacia el cerebro. Con este descubrimiento, el equipo espera desarrollar tratamientos que inhiban las expulsiones violentas e incontrolables de aire ante una alergia o tos crónica.
La tos y el estornudo son reflejos del cuerpo ante agentes irritantes en las vías respiratorias. Si el cerebro detecta la presencia de un elemento externo, ordena de inmediato la expulsión agresiva de aire por la nariz o la boca para eliminarlo. Ambos son actos automáticos desencadenados por eventos similares. Sin embargo, no ocurren con la misma frecuencia o simetría. Por ello, la medicina ha intuido durante años que las células que detectan las intrusiones en las vías respiratorias tienen rutas independientes hacia el cerebro.
El estudio, publicado en la revista Cell, señala que las neuronas sensoriales MrgprC11 son las que se activan ante elementos que provocan estornudos. Mientras tanto, las neuronas de somatostatina (SST) median la tos. Para comprobarlo, diseñaron un experimento en ratones, exponiéndolos a diferentes sustancias irritantes y alérgenos.
Las poblaciones de neuronas sospechosas se comportaron tal y como se predijo. Posteriormente el equipo contagió de gripe a los roedores e inhibió sus neuronas sensoriales en la nariz de manera artificial. En respuesta, aparecieron ratones enfermos que no estornudaban.
“A nivel de circuito, las señales del estornudo y la tos son transmitidas y moduladas por vías neuronales divergentes. En conjunto, nuestro estudio revela la diferencia en los receptores sensoriales y los mecanismos de neurotransmisión/modulación entre los estornudos y la tos. Así ofrecemos objetivos farmacológicos neuronales para el manejo de los síntomas en las infecciones virales respiratorias y las alergias”, menciona el artículo.
Más receptores para buscar virus escurridizos
El cerebro sabe exactamente cuando una partícula entra por la nariz o la garganta y ordena toser o estornudar según corresponda. Este mecanismo preciso podría ser una adaptación evolutiva al constante cambio de los virus a lo largo de la historia. Qin Liu, coautor del estudio y neurocientífico de la Universidad de Washington, apoya la hipótesis del origen del sistema de dos vías independientes, tanto en la mucosa nasal como en la tráquea.
Es muy probable que existan más neuronas sensoriales en las vías respiratorias además de MrgprC11 y SST. Los científicos necesitan realizar más investigaciones para identificar los diferentes caminos que reaccionan a compuestos químicos específicos. Es un camino prometedor pues hasta ahora no existen medicamentos que eliminen la tos o los estornudos. En su lugar, alivian las irritaciones en las fosas nasales o la garganta, y combaten los virus que desencadenan la enfermedad.
Una persona puede estornudar hasta 10 veces seguidas, dependiendo de su exposición a alérgenos comunes como el polvo, el polen o el pelaje de las mascotas. Suprimir los estornudos no es una buena elección. Recientemente, la comunidad médica documentó el caso de un hombre que se ocasionó una perforación en la tráquea al bloquear físicamente el reflejo de un estornudo.