El paso del sistema solar a través de una nube cósmica causó una de las glaciaciones de la Tierra
“Está en todas partes: en las profundidades del océano, en la Luna, en el hielo de la Antártida. Estos documentos describen un fenómeno global. Algo sucedió. Y el hierro-60 no se produce en la Tierra. Así que supe que de alguna manera este hierro-60 quedó atrapado en el polvo y, de alguna manera, hace 2 o 3 millones de años, recibimos más polvo», explicó Merav Opher, autora del estudio, en un comunicado.
Actualmente, la Tierra y su estrella atraviesan una nube interestelar local de baja densidad de mil años luz de ancho. En unos cuantos miles de años más, saldremos de ella para seguir por otra región del espacio más libre. Sin embargo, cuando los científicos retrocedieron la trayectoria del sistema solar sobre la Vía Láctea, encontraron que hace 2 o 3 millones de años coincidió con la cinta local de nubes frías. En ese mismo rango de tiempo, el planeta atravesó la glaciación cuaternaria.
Las nubes frías y la atmósfera de la Tierra
El golpe de una nube cósmica cinco veces más densa de lo usual pudo haber colapsado la burbuja magnética del sistema solar hasta reducirla a un diámetro de solo 32 millones de kilómetros. Para comparar la distancia, la Tierra y el Sol están separados por aproximadamente 149 millones de kilómetros.
En el medio interestelar, fuera de la heliosfera y de las nubes cósmicas, hay un promedio de 0.1 partículas por centímetro cúbico. Opher se refiere a esta circunstancia como un espacio casi vacío. Mientras tanto, dentro del sistema solar hay entre tres y 10 partículas por centímetro cúbico. Según los cálculos astronómicos, dentro de una nube densa podría haber hasta 3 mil partículas en la misma porción de espacio.
Merav Opher piensa que parte de esas partículas mayoritariamente de hidrógeno llegaron a la Tierra para cambiar la química de la atmósfera. La modificación afectó la formación de nubes, agotó el ozono en la atmósfera media y enfrió el clima.
“No solemos hablar del impacto de la astrofísica en la Tierra porque las escalas de tiempo astronómicas son muy largas y la especie humana surgió en la Tierra hace apenas unos pocos millones de años. Pero también hasta hace unos pocos millones de años existía la posibilidad de que pasáramos a través de una nube muy densa. No calculamos las implicaciones biológicas, pero está claro que si se encoge la heliosfera hasta el interior de la órbita de la Tierra alrededor del Sol, ya no estamos protegidos. Podría tener implicaciones significativas para la vida en la Tierra”, señaló Avi Loeb, coautor del estudio y catedrático de Harvard.