Asunción Loriente: “Algunos entienden que no les sirvo porque no les doy lo que me piden”

Asunción Loriente (Castropol, Asturias. 1972) afronta este domingo unas elecciones cruciales para el futuro del remo español. La actual presidenta del órgano federativo, uno de los tres candidatos que han conseguido los avales necesarios para optar al puesto, defiende en MARCA su gestión desde su llegada al cargo en febrero de 2018, cuando la institución vivía uno de los momentos más convulsos de su historia.

Este domingo hay elecciones a la presidencia de la Federación Española de Remo (Federemo). ¿Cuál es el panorama?

El panorama es aterrador porque hay hasta tres candidatos que hemos reunido los avales necesarios –12 o más, un 15% de la Asamblea–. El primero es Miguel Ángel Millán, presidente de la Federación Andaluza hasta hace pocos días, que tiene 27 avales. El segundo es Víctor Canal, presidente de la Federación Cántabra, que cuenta con 14. Por mi parte, tengo 25 avales y a tenor de cómo se conformó la Asamblea en la que se elegirá presidente, la cosa está muy apretada entre Millán y mi candidatura. La tercera facción, que es básicamente la que representa a Cantabria, tendrá al final poder decisorio.

Califica el panorama de aterrador, ¿por qué?

Porque es la historia que se repite una y otra vez. En el remo español parece ser que no aprendemos. Hace ocho años se unió un grupo de críticos para echar a Fernando Climent de la presidencia tras más de dos décadas en el cargo pero lo único que tenían en común era eso, no un proyecto para nuestro deporte, así que a los diez meses el nuevo presidente había dimitido porque no podía más. Ahora tiene la pinta que es más de lo mismo porque si objetivamente vemos el panorama de resultados y crecimiento, estamos mejor que nunca.

Entiendo que no a todo el mundo le guste mi gestión pero objetivamente no hay motivos como para decir que esto tiene que cambiar drásticamente. Por eso me da la impresión de que es algo parecido y es eso lo que me parece aterrador. Si la historia se repite es muy probable que en seis meses quienes se juntaron para echarme empiecen a dividirse porque cada uno quiera una cosa diferente y si es así, habremos perdido el tiempo de nuevo.

El panorama es aterrador porque, si la historia de hace ocho años se repite, es muy probable que en seis meses quienes se juntaron para echarme empiecen a dividirse porque cada uno quiera una cosa diferente

Nada sorprendente si tenemos en cuenta que usted ha sufrido muchas presiones desde su llegada al cargo en febrero de 2018, superando incluso una polémica moción de censura en febrero de 2022 por apenas dos votos.

Cierto, y el panorama era muy parecido al que tenemos ahora. En esa ocasión me salvó que el candidato alternativo era bastante polémico -tanto el COE como el CSD criticaron abiertamente a José Agustín Gómez-Raggio por una serie de tuits tildados de machistas, racistas y xenófobos- y al final no fue una persona de consenso, valorada y respetada por todas las facciones del remo nacional. Quizás debí aprender de lo ocurrido y sé que peco de ingenua pero no prometí nunca nada a nadie y sigo sin hacerlo porque no puedo ofrecer lo que no es mío. Yo me dedico a trabajar y algunos han entendido que no les sirvo porque no les doy lo que me piden.

No preparé el proceso electoral de 2021 y tampoco he preparado éste porque creo que las cosas se deben de hacer de manera responsable y natural. Visto así, lo que algunos me echan en cara es que me haya dedicado a trabajar y sacar resultados para nuestro remo en vez de preparar las actuales elecciones. Vale, lo entiendo, pero prefiero que me echen en cara eso a que me digan que le he dado no sé cuánto a alguien y al otro no. Prefiero que me echen en cara que tenemos unas normas tan estrictas que al equipo nacional entra quien lo merece y no el de no sé qué federación autonómica porque me apoyó a la hora de mi reelección como presidenta. Prefiero hacer las cosas así, sinceramente. 

Hay dos presidentas entre todas las federaciones españolas de deportes olímpicos y a una quieren moverle la silla. ¿Hay machismo en el entramado federativo?

Sí, claro que lo hay. El mundo del deporte sigue estando muy masculinizado porque las mujeres no llevamos demasiados años ni practicándolo ni en puestos de gestión. De todos modos, más allá de ese machismo hay aún una estructura que podemos calificar de forma suave como ‘antigua’ que supone un problema aún mayor.

Es curioso que diga eso porque desde hace años, muchas voces critican que las federaciones funcionan como reinos de taifas por culpa de las autonómicas, que al final tienen el poder de poner y quitar presidentes. ¿Qué opina al respecto?

Pues que es absolutamente cierto. Podemos patalear pero es el sistema organizativo que tenemos. Es verdad que dos o tres federaciones autonómicas pueden poner y quitar presidentes cuando lo que deberían hacer es trabajar en lo que es su competencia, que es sobre todo la tecnificación y la base. Esas cosas que sobre el papel son palmariamente claras y luego son tan difíciles de llevar a cabo. El problema es que demasiadas veces las federaciones autonómicas se dedican a otra cosa. Se dedican, como he visto ahora en estas elecciones, a hacer ingeniería electoral para sumar votos y no tienen reparos en inventarse clubes o asegurar que tienen más técnicos que deportistas para acaparar más poder. La realidad es esa y no tiene el más mínimo sentido.

Por su parte, la Federación Española no tiene ningún poder sobre las autonómicas y me parece bien porque cada una tiene una misión diferente. Según la Ley del Deporte, a nosotros nos corresponde dar los mejores medios posibles a los equipos nacionales y la ordenación de nuestra disciplina; ese tipo de cosas. Es extraño por tanto que trabajemos así, que clubes a los que a priori no les interesa lo más mínimo lo que pasa en la Federación Española al final sean los que deciden su futuro. 

Es verdad que dos o tres federaciones autonómicas pueden poner y quitar presidentes cuando lo que deberían hacer es trabajar en lo que es su competencia, que es sobre todo la tecnificación y la base

España clasificó hasta cinco barcos para los Juegos del pasado verano, un hito que no tiene precedentes, y logró cuatro diplomas. ¿Está contenta con los resultados de Paris 2024?

Sí que lo estoy. No llegó la medalla que todos queríamos -el remo español sólo tiene un metal olímpico que data de Los Angeles 1984- pero vistos los resultados en su conjunto es para estar muy satisfechos porque corroboran lo que hemos crecido en estos últimos seis años. Es todo cuestión de prioridades y de dónde inviertes los recursos y está claro que invertir en rendimiento genera buenos resultados. Además no son sólo los cuatro diplomas olímpicos porque hemos tenido otro paralímpico y medallas en todas las competiciones juveniles y sub’23 a las que hemos ido.

La realidad es que desde 2018 hemos sumado tres medallas mundiales absolutas en pruebas olímpicas, que son las mismas que teníamos en el resto de nuestra historia. Creo por tanto que algo se habrá hecho moderadamente bien. Por supuesto que tenemos unos deportistas extraordinarios y que sin ellos no se podría hacer nada, pero también hay que dotarles de toda la tecnología y el material que necesiten. Eso es una apuesta arriesgada, sobre todo para una federación como la nuestra que tiene pocos recursos porque históricamente no ha tenido buenos resultados.

Una de las cosas que me achacan es que he generado déficit y se echan las manos a la cabeza diciendo que tenemos una federación poco menos que al borde del colapso, cosa que no es cierto. Lo que sí es verdad es que si inviertes en rendimiento y tus resultados mejoran también mejora tu financiación pública, porque eres creíble y quien te paga ve que inviertes bien el dinero que te dan. 

La realidad es que desde 2018 hemos sumado tres medallas mundiales absolutas en pruebas olímpicas, que son las mismas que teníamos en el resto de nuestra historia. Creo por tanto que algo se habrá hecho moderadamente bien

¿Cuál es su proyecto de cara a Los Angeles 2028, una edición en la que el remo de mar, disciplina en la que somos una potencia mundial, entra en el programa olímpico?

Lo primero, terminar de profesionalizar el equipo de Beach Sprint en remo de mar. Llevamos tres años trabajando de manera organizada, poniendo recursos propios, que son escasos, porque no podíamos usar los públicos al tratarse de una modalidad que no era olímpica. Eso cambia ahora y ya podemos trabajar con ellos como con cualquier otro equipo de la Federación, con sus concentraciones, sus servicios médicos y todo lo que necesiten.

En cuanto a la modalidad olímpica tradicional, tenemos que continuar con las categorías inferiores, sobre todo con el equipo sub’23, con el que ya hicimos un esfuerzo importantísimo este año concentrándoles todo el verano. Además hay que implantar el programa de tecnificación nacional en todas las federaciones autonómicas aunque eso depende de ellas. Nuestro interés es que se haga en todas porque si se trabaja con el mismo criterio, cuando llegan a un equipo nacional juvenil o sub’23 tienen mucho trabajo hecho.

Por último, tenemos que seguir creciendo en recursos propios de patrocinadores al margen del dinero que nos da el CSD para las modalidades olímpicas porque tenemos otras especialidades como el remo tradicional, que mueve a muchísimos deportistas y tiene un gran arraigo en toda la costa. Ahí llevamos tiempo preguntando a quienes lo practican qué quieren, qué necesitan y qué esperan de la Federación dentro de nuestras posibilidades. 

Apoyamos muchísimos proyectos, desde los que se hacen con mujeres enfermas de cáncer de mama, que está demostrado que es un elemento de recuperación, hasta el circuito de remo indoor virtual

Más allá de la alta competición, ¿cómo está trabajando la Federación? ¿Cuáles diría que son sus principales logros?

Bueno, pues hemos crecido en practicantes y visibilidad y afortunadamente, llevamos unos años que cuando salimos en los medios de comunicación es por nuestros éxitos deportivos. Además apoyamos muchísimos proyectos, desde los que se hacen con mujeres enfermas de cáncer de mama -Dragón Boat BCS-, que está demostrado que es un elemento de recuperación, hasta el circuito de remo indoor virtual en el que puede participar cualquier persona que tenga una máquina de remo en su casa o su gimnasio. 

Llevamos también tres años con una liga patrocinada por Iberdrola de remo de mar, que es una especialidad que está creciendo muchísimo porque no necesitas una pista de 2.000 metros en línea recta y se puede hacer un formato de competición diferente en cada sitio. Al final se trata de crecer y posicionarse.