Atlético de Madrid: Las claves del adiós de Berta del Atlético
El 20 de enero de este año MARCA adelantó dos fichajes importantes en clave Atlético. No eran para el verde, no, pero desde la propia entidad deslizaban la trascendencia de dos adquisiciones que llegaban para reforzar la estructura de los despachos.
De paso, se cumplía un viejo deseo de Miguel Ángel Gil, dar un paso al lado en el día a día. Sus cargos en organismos europeos y en LaLiga restan tiempo al consejero delegado a la hora de gestionar el club. De ahí que la llegada de Óscar Mayo y Carlos Bucero cambiaba el escenario en los despachos rojiblancos.
El segundo, en lo que afecta al equipo, por llegar como director general de fútbol. Un cargo en el que engloba toda la parcela deportiva…. incluida la figura de Andrea Berta que seguía (todavía lo hace) desempeñando sus funciones como director deportivo de la entidad del Metropolitano.El italiano llegó al club en 2013 (todavía estaba Caminero en el puesto), pero fue en 2017 cuando se quedó al mando de las operaciones rojiblancas. Pero algo cambió desde el citado 20 de enero de este año.
El italiano pasó revista con Savic y Simeone
Primero fue Mateu
Incluso, antes de que llegara Bucero como director general se negoció con un hombre de fútbol como Mateu Alemany. No se llegó a un acuerdo (no gustaron las filtraciones sobre su posible llegada) y Berta ya mostró su disconformidad con que se creara un puesto entre su labor… y Gil Marín. Cambiar, insisten los que siguen el día a día de la entidad, de interlocutor (del consejero delegado al nuevo director general) aunque sin perder sus funciones.
Todo ello, para un directivo como Berta, con un sueldo muy alto tras muchos años de tener poder y ofertas de grandes de Europa que luego detallaremos. De ahí que el cambio en la organización de rol molestara a Andrea hasta el punto de no querer seguir desde hace tiempo en la entidad. Con contrato en vigor, se negociaría (insisten que todavía no lo hacen) para acabar más pronto que tarde una situación que no es cómoda para ninguna de las partes.
El presidente colchonero analizó la actualidad del equipo antes del partido contra el PSG.
Berta no quiere estar por estar…
Y es que Andrea Berta no quiere «estar por estar» en el Atlético. No quiere, en definitiva, su situación actual por lo que considera que la mejor solución es negociar una salida, un finiquito, y continuar su carrera en otro club una vez que todo los caminos indican que su paso por la entidad madrileña, superada ya la década en el club, está en su recta final.
… Y está cotizado en el mercado
Mientras se resuelve la situación, Berta, pese a lo que se han contado en algunos foros, sigue en el día a día del equipo. Va a los entrenamientos, entra en el vestuario, viaja a la mayoría de los partidos y sigue despachando con la gente de un vestuario que ya conoce que su paso por el Atlético está cerca de llegar a su fin en un 2024 que ha vivido cambios muy importantes en la estructura rojiblanca.
Todo sigue igual con Simeone
La marcha de Berta no cambia el paso en cuanto al banquillo. Nadie duda de la continuidad de Simeone (con contrato hasta 2027) y el técnico se ve con fuerzas para seguir con un proyecto en el que cree. Los que mandan en la entidad entienden que el argentino es intocable y su apuesta por el técnico es firme.