Boric anuncia una reforma al sistema de financiamiento de educación superior y propone una condonación parcial a los deudores del CAE
El presidente de Gabriel Boric ha anunciado la noche de este lunes un proyecto de ley para acabar con el Crédito con Aval del Estado (CAE)un apoyo ofrecido a los estudiantes de educación superior de Chile para costear sus carreras. La propuesta, que se presentará este martes en el Congreso, contempla un nuevo financiamiento de la educación superior con aranceles regulados y cumple parcialmente con la promesa de campaña del mandatario de una condonación universal de las deudas educativas. El mandatario de izquierdas, uno de los líderes de las protestas estudiantiles de 2011 y 2012, ha dado a conocer los detalles en una cadena nacional a menos de tres semanas de las elecciones para elegir alcaldes, gobernadores y concejales.
“Hoy el CAE es un problema para todo Chile”, dijo el presidente, “para quienes con mucho esfuerzo mes a mes lo pagan; para quienes no han podido hacerlo; para aquellos que ni siquiera han podido terminar sus estudios y, aún así, están endeudados; y también lo es para las arcas fiscales”. Desde que se creó el CAE en 2006, el Estado de Chile ha desembolsado hasta la fecha más de 9.000 millones de dólares para poder financiarlo.
Boric destacó la reforma educativa de 2016 que trajo consigo el mecanismo de gratuidad en la educación superior, implementado por la expresidenta Michelle Bachelet, pero advirtió que una parte importante del acceso continúa dándose a costa del endeudamiento. Más de un millón y medio tienen deudas por estudiar —Fondo Solidario, Crédito Corfo o CAE—, y de ellas, el CAE es el instrumento más significativo, con un 1.200.000 deudores. La deuda total es de unos 11.700 millones de dólares –el 58,3% ha sido financiado por el Fisco y un 41,7% por la banca–, según la Comisión Administradora del Sistema de Créditos para Estudios Superiores (Comisión Ingresa) hasta el 31 de diciembre de 2023. La tasa de morosidad en el pago de sus cuotas de los desertores alcanza el 73%, mientras que de los egresados es de 34%. El 69% de la población deudora del CAE tiene ingresos mensuales inferiores a 750.000 pesos chilenos (825 dólares), según datos preliminares citados por la subsecretaría de Educación.
El emblemático proyecto de la Administración de izquierdas, según dijo el mandatario, tiene tres objetivos: “El primero, condonar en base a criterios de justicia y mérito, parte de las deudas educativas. Segundo, reorganizar la deuda, que quede en términos razonables para quienes aún deban. Y por último, terminar con el CAE, reemplazándolo por un nuevo instrumento de financiamiento público de la educación superior”.
En relación a la condonación, el mandatario señaló: “Todos quienes adscriban voluntariamente a este instrumento tendrán una condonación del porcentaje de su deuda. Este porcentaje se va a definir según si la persona egresó o no de su carrera, si tiene o no su deuda al día, y de acuerdo al número de cuotas que haya pagado a la fecha”. Según un informe de la Comisión Ingresa, la entidad administradora del sistema de créditos para estudios superiores, el 27% de los beneficiarios (207.000 personas) está en etapa de estudio o de gracia, por lo que aún no está pagando. Del 73% restante, el 78% egresó de una carrera y el 22% dejó los estudios sin terminar.
Sobre la reorganización de la deuda, en la cadena nacional Boric explicó: “Si tras la condonación inicial aún queda parte de la deuda por cubrir, el plan ofrecerá dos alternativas: quienes puedan pagar el 75% de su saldo habrán puesto, de esta manera , fin a su crédito; y de no poder realizar este prepago, se reprogramará con cuotas proporcionales a sus ingresos, con un tramo exento de pago y cuotas que serán siempre más bajas que las que actualmente pagan”. También apuntó que, quienes ya pagaron su deuda del CAE, tendrán beneficios tributarios una vez que se implemente el proyecto de ley. “De esta manera, reconocemos explícitamente el esfuerzo de quienes con sacrificio han cumplido con sus obligaciones”, expresó.
Según el presidente chileno, más de 75.000 personas quedarán con su deuda totalmente saldada y “millas quedarán protegidas por el tramo exento de pago”.
La propuesta para un nuevo financiamiento de la educación superior, “FES”, contempla que quienes cursan sus carreras lo hagan sin pagar aranceles, sólo pudiendo existir un copago para aquellos que estén en el 10% de mayores ingresos. “La gran mayoría de los beneficiarios del FES no deberán desembolsar recursos ni endeudarse, como ocurre hoy con el sistema de créditos universitarios, eliminando de esta manera el estrés asociado al pago o la adquisición de deudas durante esta importante etapa de la vida”, afirmó el mandatario.
Sobre cómo se financiará el nuevo sistema, el presidente explicó que los beneficiarios, un año después de ingresar al mundo laboral, comenzarán a realizar una retribución que “permitirá a otros estudiar en el futuro, que no podrá ser en ningún caso superior a un 8 % de sus ingresos y por un período proporcional al tiempo de su estudio”. “Los bancos no participarán de este nuevo instrumento de financiamiento. Con el FES, no habrá espacio para la especulación, el abuso, ni para lucrar, sino una retribución justa por la formación recibida”, añadió.
La condonación de la deuda y la reforma al sistema de créditos estudiantiles había estado alejada del horizonte del Gobierno de Boric. Una de sus mayores cortapisas era la postura del propio ministro de Hacienda, Mario Marcel, que durante el año 2023 descartó un perdonazo masiva a los morosos tras el rechazo a la reforma tributaria. El bajo crecimiento y una inflación aún sin control, además de una redirección de los recursos hacia un sistema escolar golpeado por los efectos de la pandemia, hicieron que el proyecto fuese postergado.