Descubren la evidencia más fuerte de vida extraterrestre hasta la fecha gracias al James Webb
Astrónomos han encontrado uno de los indicios más prometedores de vida extraterrestre orgánica más allá del sistema solar, a solo 124 años luz de distancia. Con ayuda del espectrógrafo del Telescopio Espacial James Webb, los investigadores detectaron biofirmas atribuíbles a microorganismos marinos en K2-18b, un exoplaneta de tipo subneptuno situado en la zona habitable de su estrella madre.
De acuerdo con la investigación liderada por la Universidad de Cambridge, detectaron huellas de sulfuro de dimetilo (DMS) y disolfuro de dimetilo (DMDS) en la atmósfera del exoplaneta K2-18b. En la Tierra, estos compuestos son producidos únicamente por vida microbiana como el fitoplancton.
Los científicos a cargo admiten que existe la posibilidad de que estas biofirmas sean producidas por un proceso químico desconocido y ajeno a microorganismos. Sin embargo, también enfatizan que los datos representan la evidencia más sólida hasta la fecha sobre posible vida en exoplanetas. Los resultados fueron publicados en la revista científica The Astrophysical Journal Letters.
Las huellas en el planeta “hyceano”
K2-18b tiene 8.6 veces la masa de la Tierra y casi triplica su tamaño. Se encuentra en dirección a la constelación de Leo y orbita una estrella enana roja. El planeta está muy cerca del astro (tarda solo 33 días en completar una órbita), pero debido a la poca temperatura de la enana roja, K2-12b está en una codiciada región espacial que, en teoría, permite que exista agua líquida sobre su superficie.
Este exoplaneta es además uno de los principales candidatos para confirmar la existencia de los planetas hyceanos, una clase teórica de mundo caracterizado por contar con vastos océanos líquidos y una atmósfera rica en hidrógeno. Según astrobiólogos, los planetas hyceanos representan una de las mejores oportunidades para encontrar vida extraterrestre.
No es la primera vez que K2-18b capta la atención de los astrónomos. En 2023, el mismo equipo de científicos encontró metano y dióxido de carbono en su atmósfera. Fue la primera vez que se descubrieron moléculas basadas en carbono alrededor de un planeta dentro de la región habitable. También identificaron señales difusas de biofirmas de sulfuro de dimetilo, pero en ese momento fueron ignoradas. Debían enfocarse en su objetivo principal. Dos años después, el equipo volvió a echar un vistazo al planeta prometedor.
“No sabíamos con certeza si la señal que vimos la última vez se debía al DMS, pero su simple indicio fue lo suficientemente emocionante como para que volviéramos a observarla con el JWST y un instrumento diferente”, contó Nikku Madhusudhan, científico que lideró la investigación.
«Trabajos teóricos anteriores habían predicho la posibilidad de altos niveles de gases sulfurosos como el DMS y el DMDS en los mundos Hyceanos. Y ahora lo hemos observado, de acuerdo con lo predicho. Con todo lo que sabemos sobre este planeta, un mundo Hyceano con un océano repleto de vida es el escenario que mejor se ajusta a los datos disponibles”, concluyó Madhusudhan.