EE.UU. devuelve a Cuba a 82 migrantes irregulares en un nuevo vuelo de repatriación
MIAMI, Estados Unidos. – Un total de 82 migrantes irregulares cubanos, entre ellos 74 hombres y ocho mujeres, fueron devueltos este jueves 24 de abril a la Isla desde Estados Unidos como parte de los acuerdos migratorios bilaterales entre ambos países, informó el Ministerio del Interior (MININT) del régimen cubano en su cuenta de X.
El grupo arribó al Aeropuerto Internacional “José Martí”, de La Habana, a bordo de un vuelo coordinado entre ambas naciones. Se trata de la cuarta operación de repatriación aérea realizada desde EE.UU. a Cuba en lo que va de 2025.
Con esta nueva operación, el número total de personas retornadas a la Isla desde diferentes países de la región asciende a 450 en 15 devoluciones ejecutadas durante el año, según cifras oficiales.
El Gobierno cubano no ofreció detalles sobre las condiciones en las que fueron devueltos los migrantes, ni sobre su destino una vez en territorio nacional. Tampoco se precisó si alguno de los repatriados será objeto de sanciones administrativas o penales.
La Habana y Washington reanudaron en abril de 2023 los vuelos de deportación, enfocados principalmente en personas consideradas “inadmisibles” tras ser retenidas en la frontera de Estados Unidos con México. Además, mantienen un acuerdo bilateral que establece que todos los migrantes que lleguen por mar al territorio estadounidense serán devueltos a la Isla.
Pese al clima antiinmigrante que reina en EE.UU., aún algunos grupos de cubanos intentan cruzar el estrecho de Florida para escapar de las duras condiciones de vida en la Isla. En medio de un contexto de escasez de alimentos, insumos médicos y una grave crisis inflacionaria, muchos residentes de la mayor de las Antillas arriesgan sus vidas para llegar al país norteamericano.
No obstante la actual crisis migratoria, por la que casi medio millón de cubanos ha ingresado a Estados Unidos en los últimos tres años, el programa de parole humanitario lanzado por la Administración Biden en enero de 2023 (y cancelado por Donald Trump tras su llegada a la Casa Blanca) contribuyó a disminuir el flujo de balseros.