EEUU comenzará a testar leche sin pasterizar para detectar el virus de la gripe aviar
El Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA, por sus siglas en inglés) iniciará un programa nacional de pruebas para detectar la presencia del virus H5N1, también conocido como «gripe aviar». Los análisis se centrarán en la leche prepasteurizada en las instalaciones del procesamiento de productos lácteos. El programa exige que cualquier persona involucrada en la producción de leche proporcione muestras al USDA si se le solicita, eso incluye: «cualquier entidad responsable de una granja lechera, un transportista de leche a granel, una estación de transferencia de leche o una instalación completa de procesamiento». El objetivo final es identificar rebaños individuales donde circula el virus y utilizar los mecanismos existentes para rastrear contactos, y restringir el movimiento de ganado infectado.
Un vector de enfermedades bovinas
Al momento de esta publicación, el Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés) ha identificado 58 casos de humanos infectados por el virus de la gripe aviar H5N1, más de la mitad de ellos en California. Solo dos se produjeron debido a contacto con la agricultura, ya sea con ganado; 35 casos, o aves de corral, 21. El material genético del virus ha aparecido en el suministro de leche y, aunque la pasteurización debería eliminar cualquier agente infeccioso intacto, la leche cruda se caracteriza por carecer de este proceso, provocando un retiro parcial del mercado cuando el virus se propagó en la leche cruda. La ciencia certifica que el virus puede reproducirse en otras especies si beben leche de vacas infectadas.
Aunque los casos registrados en humanos con gripe aviar han sido leves, la preocupación actual es que la circulación prolongada en otros mamíferos permita que el virus evolucione de maneras que expongan a los humanos a un mayor riesgo de infección o que la enfermedad provoque síntomas más graves. Por tanto, el compromiso del USDA es eliminar al ganado y resguardarlo en espacios de control. Cuando el departamento anunció la instauración de este programa, señaló que había dos vacunas candidatas en ensayo clínico; hasta su validación, planea utilizar el manual estándar para manejar infecciones emergentes: rastreo de contactos y aislamiento. El USDA tiene la capacidad de obligar a los dueños del ganado a ser más cooperativos de lo que resultó ser la población humana infectada.
El plan de cinco pasos
El USDA refirió que el aislamiento y el rastreo de contactos son protocolos dentro de la Etapa 3, de un plan de cinco clases para controlar el H5N1 en el ganado, siendo las dos etapas anteriores las de muestreo y análisis obligatorios; ambos se deben gestionar estado por estado. Una vez que se haya contenido con éxito el virus en el estado, el departamento pasará al muestreo por lotes para garantizar que cada demarcación permanezca libre de infecciones. Esto es esencial, dado que no existe una idea clara de cuántas veces el virus ha saltado de reservorio normal en las aves a poblaciones de ganado.
Así, el USDA se asegura de llegar a la Etapa 5, a la cual denomina: «Demostrar que el ganado lechero estadounidense está libre de H5». Es probable que el ganado lechero tenga contacto diario con las aves y que el virus se vuelva a introducir regularmente en la población, lo que dejaría la contención como la única opción hasta que las vacunas estén listas. Las pruebas se centrarán inicialmente en los estados donde se ha producido una mayor transmisión del ganado a los seres humanos, o donde el virus está presente: California, Colorado, Michigan, Mississippi, Oregón y Pensilvania. El USDA publicará los resultados y próximas actualizaciones semanalmente.
Artículo publicado originalmente en Ars Technica. Adaptado por Alondra Flores.