El asalto al trono de los Celtics
Sinopsis de la película: mientras los Boston Celtics pretenden ser el primer equipo NBA en repetir título desde los Warriors en 2018, un grupo de equipos está dispuesto a impedirlo, y buscan destronar a los verdes de lo más alto. Con esta premisa arranca la NBA en una de sus últimas superproducciones: la temporada 2024-25.
La elección es casi unánime a la hora de elegir al gran favorito al título: Boston Celtics, pero los verdes no se han reforzado (aunque tampoco se han debilitado) y sí algunos de sus máximos rivales.
Dallas ha incluido a Klay Thompson para formar su particular ‘Big three’ con Luka Doncic y Kyrie Irving. Además han añadido otras piezas sólidas a su armazón como Spencer Dinwiddie y Quentin Grimes. Lo mismo que Philadelphia con Eric Gordon, Caleb Martin o Andre Drummond, aunque su fichaje estrella es un Paul George que les convierte automáticamente en candidatos.
También los Knicks buscan protagonismo en el Este y con Karl-Anthony Towns y Mikal Bridges buscan su primer anillo desde 1973. Es otra peli: ‘Misión imposible’.
El Oeste fue el pasado año territorio de los Thunder, que han mejorado si cabe una formidable plantilla liderada por Shai Gilgleous-Alexander. Y los Nuggets, aunque algo menos, también cuentan como candidatos al campeonato esta temporada.
Pero la película tiene otros muchos focos de interés. Para conocer al campeón hay que esperar hasta el final, pero hay siete meses de partidos que tienen que arrojar a los protagonistas de la temporada.
De primeras, casi todos estarán pendientes de Los Ángeles, en el año 22 de LeBron James. La leyenda de los Lakers cumplirá su sueño de jugar junto a su hijo. Serán la primera pareja padre e hijo en la NBA, además compartiendo equipo. La novedad quizá genere más ruido de lo que necesita el proyecto de J.J. Redick en un delicado banquillo como el amarillo. Las expectativas de salida parecen las de tener que luchar por entrar en los Playoffs vía Play-In.
El salvaje Oeste
Y es que el Oeste va a ser salvaje. A los favoritos hay que unir equipos muy reforzados, como los Kings que ya han hecho buenas temporadas. La llegada de DeMar DeRozan les dota de un gran anotador y de otro ‘Big three’ con él, D’Aaron Fox y Domantas Sabonis.
Especial atención a los Grizzlies, uno de los equipos llamados a ser uno de los más mejorados al final de la temporada. Con jugadores como Ja Morant, Marcus Smart, Jaren Jackson, Desmond Bane o Santi Aldama no es descartable ni que entren en Playoffs de forma directa.
La lucha por el MVP
En el capítulo de los reconocimientos individuales, el del premio al MVP es el que más debate suscita desde el inicio. Habrá ‘power rankings’ todas las semanas y en ellos estarán siempre Shai, Doncic, Nikola Jokic, Giannis Antetokounmpo o Jayson Tatum, demostrando que el baloncesto internacinoal se ha adueñado de casi todos los estamentos de la NBA.
Y aunque aún no está para ganar ese premio, pero lo hará tarde o temprano, será la temporada de Victor Wembanyama, cuya mejora física asusta todavía más a sus rivales. ‘Wemby’ ya es uno de los símbolos de la NBA del presente y del futuro.
El baloncesto español estará representado en la pista por Santi Aldama, único superviviente del otrora amplio repertorio de jugadores españoles en la Liga, y en el banquillo por Jordi Fernández, que se convertirá en el primer español en dirigir a un equipo de la NBA.
Aldama, que espera minutos de juego en unos Grizzlies potentes, es el último superviviente español si tenemos en cuenta que hace ocho años, en la temporada 2016-17, llegaron a coincidir hasta 10 jugadores nacionales.
Jordi Fernández es el primero de su clase, un pionero en España, y tiene un ilusionante proyecto en sus manos en los Brooklyn Nets que en principio podrían tratar de optar por un puesto en los Playoffs en el Este.