El cubanoamericano Bob Menéndez se retira de la contienda electoral por el senado
El cubanoamericano Bob Menéndez, una figura prominente en la política estadounidense durante cinco décadas, ha anunciado su retiro definitivo de la arena política tras ser hallado culpable de corrupción en julio pasado.
Menéndez, quien había servido como senador demócrata por Nueva Jersey desde 2006, inicialmente se resistió a las presiones de su partido para renunciar y lanzó una campaña como candidato independiente.
Sin embargo, las crecientes críticas y los llamados a su dimisión por parte de colegas demócratas, sumados a los procedimientos legales en su contra, lo llevaron a reconsiderar su posición.
En una carta dirigida al jefe de la División Electoral de Nueva Jersey, Menéndez solicitó oficialmente que su nombre fuera retirado de la boleta electoral para las elecciones de noviembre, una movida que lo excluye por completo de la política estadounidense.
El anuncio llega poco después de su renuncia al Senado, efectiva a partir del 20 de agosto, luego de ser condenado por aceptar sobornos.
El gobernador del estado, Phil Murphy, se vio obligado a nombrar a un reemplazo temporal, designando a George Helmy, su exjefe de gabinete, para ocupar el escaño vacante en el Senado. Helmy servirá hasta que los resultados de las elecciones de noviembre sean certificados, momento en el cual se nombrará al ganador para ocupar el puesto de manera definitiva.
Con la salida de Menéndez, la contienda electoral de noviembre se presenta como una competencia reñida entre el representante demócrata Andy Kim y el empresario republicano Curtis Bashaw, quienes ahora compiten por el escaño dejado por uno de los políticos más veteranos del país.
El 16 de julio un jurado del tribunal federal de Nueva York encontró a Menéndez culpable de 16 cargos penales, incluidos obstrucción a la justicia, fraude electrónico y extorsión.
La fiscalía detalló un esquema de sobornos en el que Menéndez, junto con su esposa Nadine, aceptó cientos de miles de dólares en efectivo, lingotes de oro y pagos de automóviles e hipotecas a cambio de favores políticos para tres empresarios. Además, se le acusó de actuar como agente extranjero en nombre de Egipto y Qatar, un cargo que añadió gravedad al caso.
Menéndez ha mantenido su inocencia, asegurando que apelará la decisión. La sentencia está programada para el 29 de octubre, apenas una semana antes de las elecciones del 5 de noviembre, en las que ya no participará como candidato.