Estados Unidos confirma el primer caso grave de gripe aviar
En todo 2024, EE UU registró decenas de casos humanos de H5N1 o gripe aviar, todos ellos leves, hasta ahora. Los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés) confirmaron el miércoles, 18 de diciembre, que un paciente de Luisiana fue hospitalizado por un cuadro grave del virus, siendo el primer caso severo en EE UU.
El virus ha perjudicado bandadas de aves de corral y aves silvestres en todo el país e infectado a más de 800 rebaños lecheros en 16 estados. Los animales infectados transmiten el virus a las personas que están en contacto con ellos. Desde abril se han notificado 61 casos humanos de gripe aviar en ocho estados: de ellos, 37 estuvieron expuestos a vacas lecheras enfermas o infectadas, mientras que 21 se empleaban en granjas avícolas y operaciones de sacrificio. En esos casos, las personas desarrollaron conjuntivitis y síntomas respiratorios leves, pudiendo recuperarse en su totalidad.
Una infección insólita
En otros países, la gripe aviar se asocia con enfermedades severas, incluidos brotes que provocaron la muerte en hasta el 50% de los casos. Entre 2003 y 2023, de las 878 personas que dieron positivo en las pruebas del virus, 458 fallecieron. Una investigación del Departamento de Salud de Luisiana y de los CDC determinó que el paciente hospitalizado, residente del suroeste de Luisiana, estuvo expuesto a aves enfermas y muertas en bandadas de su patio trasero. Este es el primer caso en todo EE UU relacionado con la exposición a una bandada de traspatio, y no a una granja comercial.
«Aunque se está investigando el origen de esta infección en Luisiana, se cree que el paciente del que informó Luisiana estuvo expuesto a aves enfermas o muertas en su propiedad», declaró Demetre Daskalakis, director del Centro Nacional de Inmunización y Enfermedades Respiratorias de los CDC, durante una rueda de prensa celebrada el miércoles. No se dispone de más detalles sobre la fuente de exposición o el estado del paciente.
A finales de agosto, en Missouri, una persona con gripe aviar fue hospitalizada, pero los funcionarios de los CDC afirman que se debió a «afecciones médicas subyacentes». El paciente no presentaba síntomas respiratorios ni estaba gravemente enfermo a causa de la infección: «En el caso Missouri, no disponemos realmente del mismo tipo de datos que respalden que estaba relacionado con una infección gripal», recalca Daskalakis.
Existen similitudes genéticas entre el virus del paciente de Luisiana y el de un adolescente de Canadá hospitalizado por H5N1. Los científicos clasifican el virus de Luisiana como tipo D1.1, el mismo que se encontró en el paciente canadiense y en otro caso del estado de Washington. Esta variante también se ha detectado en aves silvestres y de corral en Estados Unidos. Es diferente del tipo B3.13, que se ha detectado en vacas lecheras, en algunos brotes en aves de corral y en casos humanos esporádicos en varios estados. Los científicos de los CDC trabajan en una secuenciación genómica adicional de la muestra vírica del paciente de Luisiana; esta podría identificar cambios potencialmente preocupantes en el virus que indicarían una mayor capacidad de infectar a los humanos o de transmitirse de persona a persona.
Hasta ahora no se ha detectado ningún contagio de gripe aviar H5N1 de persona a persona. Los CDC afirman que el riesgo inmediato para la salud pública sigue siendo bajo, pero que las personas expuestas a animales infectados por motivos laborales o recreativos corren mayor peligro de contraer el virus: «Esto significa que los propietarios de aves de traspatio, cazadores y otros aficionados a las aves también deben tomar precauciones», esclarece la agencia en un comunicado.
Artículo originalmente publicado en WIRED. Adaptado por Alondra Flores.