Grave acusación contra un grupo extranjero de catering empresario
A principios de noviembre, la posible salida del país de una de las principales multinacionales proveedoras de catering empresario abrió un fuerte conflicto gremial que, de manera indirecta, involucró a una de las mayores automotrices de la Argentina.
El problema fue generado por versiones que daban cuenta de que Aramark Argentina, filial local del grupo de origen chileno-norteamericano, «estaba armando las valijas».
Se trata de un holding que ofrece servicios de alimentación y gestión de instalaciones, y cuenta con más de 25 años de presencia en el país y da trabajo a más de 1.500 personas y que, a nivel global es reconocida como un referente en servicios de alimentación y hospitalidad, operando en sectores como la minería, petróleo y gas, educación, salud y empresas industriales.
En ese contexto, la Unión de Trabajadores del Turismo, Hoteleros y Gastronómicos de la República Argentina (UTHGRA), denunció a la empresa y amenazó con organizar una jornada de movilización y protesta.
Mediante una solicitada, las autoridades de la Seccional Norte de este sindicato cuestionaron el eventual desembarco de la compañía como proveedora de servicios gastronómicos para el comedor de la planta de Toyota, ubicada en la localidad bonaerense de Zárate.
Salida anunciada
Si bien en la automotriz aclararon a iProfesional «no tener nada que ver con el conflicto», lo cierto es que el gremio se puso en alerta teniendo en cuenta las versiones que suponen el retiro de Aramark del mercado local.
Fabián Agüero, secretario general de UTHGRA, Seccional Norte, fue quien firmó la solicitada en la cual el sindicato asegura que la salida de Aramark del mercado local «es de público conocimiento» y la compara con lo que ya hicieron otras empresas extranjeras que participan del mismo negocio de servicios gastronómicos como Compass y Sodexo, «siendo también de público conocimiento que la empresa estaría a la venta a nivel mundial».
Los representantes de los trabajadores gastronómicos entienden que la empresa «carece de las mejores relaciones en el ámbito laboral para con sus empleados como para con la representación sindical, circunstancia ya ocurrida en la zona cuando dejó de prestar servicio en la planta automotriz de Honda, debido a reclamos permanentes de SMATA, por problemas en el comedor, dejando allí a los trabajadores a la deriva, lo cual requirió la advertencia e intervención de nuestro gremio».
El paper también recuerda «la gran preocupación» de los trabajadores «por los cambios que se plantearían en relación con el servicio de comedor» y califica de «alarmante para todos los compañeros» esta posible decisión, «más aún cuando es una empresa manejada desde el exterior y sin capacidad de decisión inmediata en nuestro país ante eventuales conflictos».
Fuerte denuncia contra la empresa
Ahora, la misma empresa Aramark estaría envuelta en una situación legal considerada «sensible» por fuentes de la industria desde donde parten acusaciones que se vinculan con «prácticas desleales» y que hasta rozarían la ilegalidad abriendo un posible caso de evasión de impuestos y competencia deseal.
Si bien todavía no existen registros de que el caso haya desembarcado en tribunales, fuentes del sector conocedoras de la situación mencionan a varias empresas de renombre como Toyota Argentina, Acindar, PepsiCo y Astra Evangelista que estarían indirectamente involucradas o perjudicadas por esta situación que en breve sería llevada a la Justicia.
La práctica denunciada por empresarios que, por ahora, prefieren mantener el anonimato, consistiría en vender el servicio de alimentación corporativa a sus clientes que, por ley está exento del pago del IVA, discriminando la mano de obra de la materia prima.
«De esta forma, se toma el crédito fiscal de los alimentos y desnaturalizando el carácter de las normas que rigen este negocio», añaden.
Precios «por debajo»
Según las mismas fuentes, «este hecho, además de hacer incurrir a sus clientes en una gravísima contingencia fiscal, le permite a la empresa que ofrece el servicio cotizar por debajo de los valores del mercado, en una clara competencia desleal que margina a la Industria nacional».
De igual modo, un vocero gremial aseguró que la situación se viene observando «desde hace unos años como la firma Aramark, cobra precios por sus servicios por debajo del mercado y de manera poco sustentable».
El mismo sindicalista recuerda que se trata «de la misma empresa a la que además se acusó de demorar los pagos a sus proveedores para su propio beneficio financiero y contratar de manera irregular a sus empleados del gremio gastronómico y maestranza».
Todas denuncias que se suman a la ya realizadas días atrás por Fabián Agüero, secretario general de UTHGRA, Seccional Norte que alertó sobre estas prácticas mediante una solicitada, y avivó los rumores sobre el posible retiro de Aramark del mercado local.
Ya en el 2023 los responsables de la empresa a nivel local dejaron circular versiones sobre el malestar de la casa matriz por la «imposibilidad de girar dividendos» de la operación en Argentina y que «el panorama político y económico» no es del agrado de los accionistas.
En ese momento, la economía explicaba una parte de esta situación, teniendo en cuenta que la Argentina mostraba el mismo producto bruto interno (PBI) que hace 10 años y que la inflación había alcanzado los tres dígitos, los índices de pobreza se mantienen altos, entre otros factores macro.
Sin embargo, en aquel momento, el factor que más preocupaba a los empresarios era la falta de previsibilidad y las pocas señales claras de mejoras en el corto y mediano plazo, por lo que verían más factible salir del mercado como solución a todos sus problemas.