La NASA camina hacia un futuro insostenible ante la falta de presupuesto e innovación
El futuro de la Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio (NASA) está en duda, de acuerdo con un informe publicado por la organización de Academias Nacionales de Ciencias, Ingeniería y Medicina. El documento advierte que la entidad espacial estadounidense carece de una estrategia sólida que garantice la sostenibilidad de sus funciones a largo plazo. La falta de recursos y de innovación son factores que comprometen el éxito de la dependencia.
El reporte ‘NASA at a crossroads’ fue escrito por un comité de expertos aeroespaciales y forma parte de una investigación de 14 meses solicitada por el Congreso de Estados Unidos a la agencia para revisar los objetivos y planes de misión próximos.
El panel de analistas concluye que la NASA prioriza grandes y codiciosos proyectos a corto plazo en detrimento de su infraestructura básica. En consecuencia, su capacidad para innovar y desarrollar tecnologías de punta se ha debilitado. «El resultado inevitable de tal estrategia es erosionar aquellas capacidades esenciales que llevaron a la grandeza de la organización y que sustentan su potencial a futuro”, advierte el comité.
Los especialistas señalan que alrededor del 83% de las instalaciones de la NASA “ha superado con creces su vida útil”. Acusan que el presupuesto que recibe la agencia es insuficiente para “cubrir sus ambiciones”. Calculan que la subvención que la dependencia recibe del gobierno habitualmente está 3,000 millones de dólares por debajo de lo que necesita.
Norman Augustine, exdirector ejecutivo de Lockheed Martin y autor principal del trabajo, afirma que obtener más recursos del Congreso será complicado. Sostiene que es necesario cancelar, retrasar o ajustar las misiones más costosas para invertir en activos institucionales de suma relevancia estratégica, como el desarrollo de tecnología y la capacitación de la fuerza laboral.
Augustine sugiere que decisiones como las tomadas alrededor del programa ‘Mars Sample Return’ (MSR) deberán ser más frecuentes. El rover Mars Perseverance aterrizó en Marte en 2021, como parte de un esfuerzo conjunto entre la NASA y la Agencia Espacial Europea. Desde entonces, ha estado recolectando muestras de roca, suelo, atmósfera y otros materiales superficiales en búsqueda de signos pasados de vida microscópica. Los ejemplares tendrían que llegar a la Tierra en 2040, tras una misión valorada en hasta 11,000 millones de dólares. En abril de este año, la administración espacial estadounidense informó que rediseñaría la iniciativa debido a los costos y el tiempo que tardaría el proyecto en traer muestras de rocas marcianas. Pidió la cooperación de la comunidad científica para desarrollar un plan alternativo más asequible y recuperar el material en 2030.
La NASA se queda sin talento
El antiguo ejecutivo de Lockheed Martin apunta que la creciente dependencia que la NASA tiene del sector privado supone una barrera para desarrollar tecnologías de vanguardia y retener al mejor talento. El organismo tiene acuerdos comerciales con más de una decena de compañías, incluidas SpaceX, Boeing, Blue Origin, Aerojet Rocketdyne y Axiom Space. Estas firmas proveen plataformas y tecnologías emergentes útiles para abordar todas las fases de sus misiones espaciales.
Norman afirma que la agencia se está rezagando en la formación de talento interno. Con el tiempo, será incapaz de retener a personal cualificado para innovar y cubrir sus necesidades. “[La NASA] tendrá problemas para contratar ingenieros innovadores y creativos. Los especialistas con estas características no quieren tener un trabajo que consista en supervisar el trabajo de otras personas”, sentenció.
La NASA tiene 66 años de existencia. Es considerada como la principal agencia espacial del mundo. La situación que enfrenta es un riesgo potencial para mantener esta posición. La crisis se ve agravada por el sólido programa espacial de China. El país asiático ha logrado, en pocos años, ubicarse como referente en la industria.
«El impacto de la ciencia y la tecnología en general ha seguido creciendo. En palabras del presidente de la República Popular China, Xi Jinping, ‘la innovación tecnológica se ha convertido en el principal campo de batalla del juego global y la competencia por el dominio tecnológico será cada vez más feroz’», recoge la investigación. Los autores advierten que es una postura que Estados Unidos no puede desatender.
Bill Nelson, administrador de la NASA, dijo en un comunicado que los hallazgos del informe se alinean con los esfuerzos que la dependencia está haciendo para garantizar la sostenibilidad de la infraestructura, la fuerza laboral y la tecnología que la agencia necesita para las próximas décadas. “Seguiremos trabajando diligentemente para abordar las recomendaciones del comité e impulsar nuestro trabajo de vanguardia en la Tierra, en los cielos y en las estrellas”, indicó.