Los fenómenos ópticos más extraordinarios que se producen en la atmósfera
Los fenómenos ópticos son algunas de las extraordinarias «visiones» que podemos captar con nuestros ojos. Aunque a menudo pensamos que la luz del sol es amarilla, en realidad es blanca, es decir, se emite en todas las frecuencias. Sin embargo, antes de llegar a nuestros ojos, la atmósfera la filtra: cuando la luz choca con las partículas atmosféricas, puede reflejarse, absorberse o difractarse, con frecuencia se produce una combinación de estos fenómenos.
La interacción se produce de forma diferente según el ángulo de colisión, la frecuencia de la luz y la forma y propiedades de las partículas afectadas. En resumen, el «filtro» atmosférico puede funcionar de muchas maneras diferentes, dando lugar a multitud de fenómenos ópticos, cada uno más bello que el anterior.
Arcoíris
Fotografía: MARTIN BERNETTI/Getty Images
La velocidad de la luz no es siempre la misma. Debido a la reflexión, cambia en función del medio en el que se propaga: cuando entra en la atmósfera o en el agua, su velocidad se reduce, y con ella la dirección de su trayectoria. Sin embargo, la velocidad cambia de forma diferente según la frecuencia y esto es lo que provoca el arcoíris. Cuando hay gotas de agua suspendidas en la atmósfera, pero el Sol está allí, su luz se refracta dentro de las gotas, luego se refleja en su superficie y vuelve a refractarse. La mayor intensidad del fenómeno se produce cuando el ángulo entre el Sol y las gotas de agua es de 42°, pero si se produce una nueva reflexión dentro de las gotas, también puede formarse el arcoíris secundario, que tiene sus colores invertidos precisamente por la repetición del proceso.
Halo solar
Fotografía: Wild Horizon/Getty Images
Al igual que un arcoíris circular, cuando la temperatura es baja y hay cristales de hielo suspendidos en la atmósfera, puede formarse un halo solar, un círculo brillante que rodea al Sol. Este fenómeno puede observarse cuando la estrella se ve de forma transparente entre cirros, las nubes más finas y altas de la atmósfera, a menudo formadas por cristales de hielo.
Parhelio
Fotografía: CFOTO/Getty Images
A veces, a los lados de los halos pueden verse dos puntos brillantes, denominados o parhelios. Los cristales de hielo son los responsables de los parhelios, pero los que tienen una forma específica deben ser planos y horizontales para proyectar la luz hacia los lados del halo.