Los músculos de Alcaraz, el ruido ensordecedor de la Arthur Ashe y la sonrisa de Tu
El aficionado al tenis que nunca haya estado en el US Open alucinará el primer día que tenga la ocasión de sentarse en la grada de la central Arthur Ashe. El escenario de tenis más grande del mundo, con capacidad para 24.000 aficionados, es una olla de grillos cuando empieza a moverse la pelota de un lado a otro de la red.
Ni un segundo de silencio en el partido
El silencio de la Rod Laver Arena de Australia, de la Philippe Chatrier de Roland Garros y de la catedral de Wimbledon se torna en ruido en Nueva York.
La gente viene, por encima de todo, a pasárselo bien al Billie Jean King Tennis Center. No importa perderse un set por hacer la cola para un trago de vodka o de whiskye.
Detalle con Garbiñe
Garbiñe Muguruza, retirada de las pistas en abril a sus 30 años, se hacía notar por su elegancia en el palco. Lucía para la ocasión un vestido rojo. A su lado, el actor Ben Stiller. El que en su día era un ferviente admirador del tenis de Rafael Nadal ahora lo es del de Alcaraz.
Garbiñe tuvo un homenaje por parte de la organización al final del tercer juego del segundo set. Las pantallas gigantes mostraron algunos de sus mejores momentos y la española se levantó para saludar.
Muguruza había llegado desde el torneo de Monterrey donde ejerce de embajadora. También será la directora de las WTA Finals de Riad.
Tu juega el partido de su vida
El tenista australiano disfrutó como un niño pequeño de la experiencia de jugar su segundo partido en un ‘Grand Slam’ y la primera en un estadio principal. Tenía, además, el apoyo de la grada que siempre va con el más débil. Li se reía en la silla de cambios cuando se anotó el segundo set. Sabía que ese momento no volvería a repetirse y quería disfrutarlo.
Alcaraz se interesó por su rival
El murciano vio como su rival se deslizaba por el suelo de la pista en varias ocasiones y no dudó en interesarse por Tu, que le agradeció el detalle.
Los errores no forzados del campeón de Roland Garros y Wimbledon
Carlitos, que viene de conquistar los títulos de Roland Garros y Wimbledon, además de colgarse la medalla de plata en los Juegos de París, no tocó la pelota con la nitidez de otras veces y eso provocó que cometiera 35 errores no forzados.
La admiración de Kyrgios por los músculos de Alcaraz
Nick Kyrgios, que se ha pasado a entrevistador en pista, dijo admirar lo bien que le quedan al murciano las camisetas sin mangas. «Las utilizo para intentar dar miedo al rival», bromeaba.