los nuevos precios tras el tarifazo de ETECSA
El tarifazo de ETECSA ha venido a «fortalecer» un mercado de reventa de saldo que, aunque ya existía, no había alcanzado los precios de ahora.
SANTA CLARA, Cuba. – Mucho antes del tarifazo de ETECSA, Miguel David, un joven de Santa Clara que se dedica a distribuir el llamado “Paquete semanal” tenía en su poder varias líneas móviles, las tres a su nombre que permite Cubacel y tres adquiridas en el mercado informal que usaba indistintamente para otros negocios paralelos. Con las restricciones de recarga anunciadas por el monopolio de las telecomunicaciones en Cuba vio los cielos abiertos para ganar un dinero extra y seguro con frecuencia mensual.
Ya para esta fecha ha vendido el saldo correspondiente a las referidas líneas móviles al precio de 2.000 pesos. En total, a mediados de este mes, había obtenido más de 8.000 CUP netos de ganancia. “Es muy fácil. Solo tengo que recargar mis líneas y transferir el saldo a la persona interesada”, explica.
Ante el cuestionamiento de si no necesita el saldo móvil para su propio beneficio, contesta que al contar con servicio de Nauta Hogar invierte menos en el consumo de datos móviles. Miguel David y otros clientes que cuentan con ese servicio sugieren que hasta pueda llegar a surgir próximamente un mercado por cuadra en el que se cobre determinado monto por usar este tipo de conexión usando repetidores de señal. “Eso por supuesto, no sería legal, pero el cubano se las inventa para resolver”, afirma.
Lo cierto es que las medidas impositivas de ETECSA han venido a “fortalecer” un mercado de reventa de saldo que, aunque ya existía, no había alcanzado los precios de ahora. Muchas personas aprovechaban el descuento de la plataforma Transfermóvil para ganar a razón de 10 pesos por cada recarga de 100 CUP y otras vendían el saldo principal abonado por las recargas internacionales.


En redes sociales abundan las propuestas con precios diferenciados por paquetes (el menor de 120 a 700 CUP; el intermedio de 240 a 1.400; y el mayor, de 360 a 1.000 o un poco más). Algunos anuncios incluyen también la mensajería a domicilio por un costo adicional. Otros proponen las recargas internacionales al precio de 25 dólares o al cambio diario aprovechando la “promoción especial” disponible del 9 al 15 junio por el Día de los Padres.
De acuerdo con una persona que se dedica a este negocio, y que solicitó condiciones de anonimato, la oferta está destinada a quienes no cuentan con familiares en el exterior. La lógica de estos “gestores” es la siguiente: “Serían 25 gigas más los 500 de saldo por menos de 10.000 pesos al cambio, mientras que el paquete de 20 USD solo te ofrece 8. Te ahorras dinero y ganas gigas”, asegura.
Este mismo negociante, que funciona como intermediario, explica que esos 500 pesos del saldo principal pueden ser luego revendidos por el beneficiario “al precio que le quiera poner”, incluso al triple de su valor o más, por lo que estaría recuperando parte de la inversión. Estos números apuntan a que, en algún momento cercano, los precios del saldo móvil devenidos en una nueva moneda virtual podrían dispararse a la par del cambio de la divisa.


Justo cuando ETECSA limitó la compra de paquetes y recargas, Cristian Mayea, otro vendedor de saldo en Santa Clara, paró su negocio y retiró el cartel de la puerta de su vivienda que anunciaba “250 por 200 en efectivo”. “Sospeché que había gato encerrado”, asegura. Con varios miles de pesos en sus líneas móviles gracias a familiares y amistades que le recargaban desde el exterior, ahora dice que le conviene esperar a que los demás vendedores agoten su dinero acumulado de las recargas. “Ahí los tengo aguantados, el mes que viene van a valer mucho más”, apunta.
Según la lógica de Cristian, puede que el saldo de 360 que ahora se cotiza entre los 1.000 y los 2.000 pesos llegue a dispararse cuando a los “recargadores” se les agoten las reservas: “Esto es matemática pura”, advierte. “Si ese paquete te da 6 gigas y el plan extra solo 3, pues fácilmente podré venderlo a mucho más de 3.000 pesos. Negocio redondo”, concluye.