Militares de alto rango muertos en septiembre
SAN LUIS POTOSÍ, México.- Los medios cubanos han sido vehículo de difusión de la muerte, este mes de septiembre, de varios militares (cinco generales y un coronel); al tiempo que las redes sociales esparcían el rumor del deceso del General de Ejército Raúl Castro, desmentido por la prensa oficialista.
La parca, al parecer, llama a la puerta de los altos mandos militares cubanos, anunciando el fin de una era en el castrismo.
El listado de occisos lo inauguró el general de división Romárico Vidal Sotomayor García, sancionado por EE.UU. debido a su papel en la represión del estallido social del 11 de julio de 2021. Falleció a los 85 años.
Sotomayor García se desempeñaba como jefe de la Dirección Política del Ministerio del Interior (MININT), de la que dependían, entre otras fuerzas, la Brigada Especial Nacional del Ministerio del Interior (SNB) y la Policía Nacional Revolucionaria (PNR), desplegadas en la represión de los manifestantes.
Por esta razón, la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC) del Departamento del Tesoro de los Estados Unidos lo sancionó por su relación con “acciones para reprimir protestas pacíficas y prodemocráticas en Cuba”.
Cronológicamente, le siguió la muerte del general de Brigada Juan Israel Cervantes Tablada, funcionario del régimen que se desempeñaba como director general de la Unión de Industrias Militares (UIM).
Fue nombrado general de Brigada por la “capacidad mostrada”, reseñaron los periodistas oficialistas y llegó a ocupar el cargo de jefe de la Dirección de Tanques y Transporte del MINFAR. Allí tuvo a su cargo proyectos vinculados con la modernización del material de guerra cubano.
Por su lealtad a la cúpula castrista, en el año 2009 fue designado director general de la Unión de Industrias Militares, el conglomerado industrial-militar estatal de la Isla, que se ocupa de reparar el armamento y la tecnología de las unidades de tierra, mar y aire de las Fuerzas Armadas Revolucionarias, y que cuenta con más de 230 fábricas y empresas.
Apenas dos días después de la noticia de la muerte de Cervantes trascendió la de Juan Antonio Hernández Hernández, general de brigada de la reserva de las Fuerzas Armadas Revolucionarias (FAR), quien se incorporó en su temprana juventud al proceso iniciado por el fallecido dictador Fidel Castro, formando parte de la Asociación de Jóvenes Rebeldes.
Luego de participar en la campaña de alfabetización en 1961 y ser llamado al Servicio Militar General, utilizó esa vía para iniciar una carrera en las Fuerzas Armadas Revolucionarias (FAR), donde inicialmente se desempeñó en varios roles y alcanzó un cargo como jefe de pelotón de artillería.
En 1973, fue designado jefe de Sección de Transporte y Armamento en Camagüey una vez fue constituido el Ejército Juvenil del Trabajo (EJT) y 15 años después obtuvo el mando de la Sección Política de esa entidad. Para 1994, ya era jefe del Estado Mayor del EJT.
También falleció por esas fechas el general de división de la reserva Jorge Luis Guerrero Almaguer, quien participó en la llamada “limpia del Escambray” y llegó a ser jefe de artillería del Ejército Oriental y jefe de la Dirección de Cuadros del Ministerio de las Fuerzas Armadas Revolucionarias (MINFAR).
Además, fungió como sustituto del jefe de la Secretaría y jefe de la Secretaría del propio ministerio. Asimismo, ocupó el cargo de jefe de cuadros del Estado y el Gobierno e integró el Comité Central del Partido Comunista de Cuba (PCC) y la Asamblea Nacional del Poder Popular (ANPP).
Hace apenas dos días se esparció en redes sociales de funcionarios castristas la noticia de la muerte del coronel Lázaro Delgado Chaple, segundo jefe de la Dirección de Identificación, Inmigración y Extranjería (DIIE) del Ministerio del Interior (MININT).
Según confirmaron funcionarios cubanos allegados al represor, que después borraron sus publicaciones, el coronel fallecido fue parte del equipo que trabajó desde el aeropuerto en el aseguramiento de la visita del presidente Barack Obama a Cuba.
Posteriormente, fue jefe del trabajo de remodelación del Museo de la Denuncia en 5ta y 14 (Playa).
En 2022, fue candidato a formar parte de la base de datos de Represores Cubanos por su papel en la expatriación y destierro de activistas, artistas, periodistas independientes y ciudadanos críticos con el régimen.
El coronel Delgado Chaple habría participado en esa escalada de destierros forzosos de los principales activistas cubanos, explicó hace dos años el medio independiente Diario de Cuba.
Antes de finalizar el mes, sorprendió además que, a sus 85 años, el general de Cuerpo de Ejército Ramón Espinosa Martín, viceministro primero de las Fuerzas Armadas Revolucionarias (FAR) y uno de los hombres de confianza de la cúpula castrista, murió.
Espinosa Martín fue miembro del Buró Político del Comité Central del PCC y diputado a la Asamblea Nacional del Poder Popular.
Pero sin duda trascenderá por uno de sus “servicios” que mejor mostraron su lealtad a Fidel y Raúl Castro: presidió en 1989 el tribunal militar en el que se juzgó a Arnaldo Ochoa, acusado de narcotráfico internacional y fusilado tras juicio sumario.
Sin ser jurista ni tener experiencia judicial, fue designado “presidente” del Tribunal Militar Especial que condenó a muerte a militares como él mismo.