Preocupación por la salud de Michiko de Japón tras ser operada a los 90 años
No están siendo unas buenas semanas para los huesos de las reinas eméritas. Después de que recientemente
Margarita de Dinamarca
tuviera que ser hospitalizada tras una caída, ahora le ha pasado lo mismo a
la emperatriz Michiko de Japón. La esposa del emperador Akihito, que
en dos semanas cumplirá los 90 años
, ha vuelto a ser noticia por su estado de salud después de que se cayera este fin de semana en su residencia de Tokio, el Palacio Sento, y se lesionara gravemente.
Michiko «se cayó en su residencia y sintió dolor, por lo que fue programada para un chequeo en el hospital», informaba el portavoz de la agencia de la casa imperial. Los medios de comunicación japoneses informaron entonces que
sería inevitable su paso por el quirófano, ya que había sufrido una fractura en la parte superior del fémur derecho. La operación se programó para este 8 de octubre en el Hospital Universitario de Tokio.
La cirugía prevista ya ha tenido lugar y ha resultado exitosa, aunque la emperatriz
deberá permanecer hospitalizada entre una y dos semanas en las que se irá viendo su evolución. La royal alcanzará los 90 años el próximo 20 de octubre, una fecha en la que estaban previstas algunas celebraciones, que ahora podrían verse suspendidas o aplazadas por este inesperado accidente.
El apoyo inquebrantable del emperador Akihito
El padre del actual ocupante del trono del crisantemo ha visitado ya a su esposa en el hospital de Tokio. Michiko y el emperador Akihito (90) llevan casados desde 1959. En agosto, ambos fueron vistos disfrutando de un paseo por una plantación de verduras en Nagano y más recientemente acudieron a un concierto de la pianista Michie Koyama.
La pareja ya ha superado otros momentos complicados en el pasado.
En 2019, el antiguo emperador abdicó
, convirtiéndose en el primero de su país en hacerlo en más de 200 años. También fue un año aciago para su esposa, ya que
le diagnosticaron un cáncer de mama
. En 2015, se supo que Michiko sufría problemas cardíacos y también había sido operada en el pasado de ambos ojos debido a cataratas.
Ninguno de estos graves contratiempos
ha podido hacer tambalear su amor. La antigua pareja imperial sigue tan enamorada como el día en que se conocieron durante un partido de tenis. Tanto que incluso vencieron la resistencia de su familia a que el futuro emperador se casara con una plebeya.
Las confesiones de la emperatriz Michiko
Hace una década, con motivo de la celebración de su 80 cumpleaños, la emperatriz Michiko
se sinceraba de un modo muy poco habitual sobre su vida y su familia. Lo hacia respondiendo a unas cuantas preguntas planteadas por sus compatriotas en la página web de la casa imperial. «En los más de 50 años que he pasado a su lado, su majestad siempre se ha mantenido modesto y humilde, y nos ha guiado constantemente a mí y a los niños, a veces de forma estricta, pero siempre con un corazón generoso», dijo entonces sobre el emperador Akihito.
A propósito del 70 aniversario del
final de la Segunda Guerra Mundial
que se cumplía en aquel momento, la emperatriz reveló su opinión sobre la paz de la que disfruta ahora su país. «Creo que es importante que nosotros,
bendecidos ahora con la paz, aspiremos a una paz eterna y, en Japón y en el extranjero, aunemos nuestros esfuerzos para arrancar los brotes de dolor y conflicto».
La royal también habló de
su amor por la naturaleza, que descubrió a una edad temprana. «Un día, una polilla confusa entró volando en el lavadero y recuerdo que me quedé atónita por su belleza. Durante esa época, las cosas que me dejaron una impresión más fuerte fueron, sobre todo, por alguna razón, cosas relacionadas con seres vivos de la naturaleza», relataba Michiko, que sigue siendo muy aficionada a observar los insectos en el jardín de su residencia.