Quién es la poderosa y misteriosa mujer tras el Baile de Debutantes de París
Este sábado 30 de noviembre, un puñado de escogidas jóvenes de todos los confines de la tierra se presentarán en sociedad bajo la atenta y orgullosa mirada de sus padres y del brazo de sus apuestos cavaliers.
El Baile de Debutantes de París
volverá a ser uno de los eventos más glamurosos del año, de la mano una vez más de su creadora,
Ophélie Renouard. Esta ambiciosa y visionaria relaciones públicas parisina lleva moviendo los hilos de Le Bal desde inicios de los años 90, cuando se instauró como alternativa al anticuado concepto de los bailes de debutantes.
Hijas de aristócratas de europeos bailarán el vals en el Hotel Shangri-La de la capital francesa junto a hijas de cineastas, empresarios y millonarios americanos o asiáticos. Y no faltará la representación española, con
Eugenia de Borbón y Vargas
, primogénita de los duques de Anjou, y
Sofía Yadigaroglu,
una joven artista de herencia multicultural.
Organizado por primera vez en 1958 como un evento social en el Palacio de Versalles, heredero de las puestas de largo británicas del siglo XVIII, de 1994 a 2012 se celebró en el Hotel Crillon de París y ha ido pasando por varias localizaciones hasta su ubicación actual. Pero
la presencia de Ophélie ha sido siempre la constante, usando su amplia red de contactos para encontrar a sus nuevas debutantes, guiarlas en las pruebas de vestuario, gestionar la prensa y organizar la propia gala benéfica a la que solo se puede acceder por estricta invitación.
Ophélie Renouard: de Vietnam a conquistar París
Aunque por su presencia y estilo Ophélie parece una parisina de pura cepa, de hecho
nació en Vietnam, de padres franceses, y vivió hasta los diez años en Camboya, donde su padre trabajaba en una empresa petrolífera. Más tarde estudió en un internado y no llegó a la capital francesa hasta los 18 años.
Ophélie Renouard estudió psicología, pero se ha convertido en la organizadora de las fiestas más exlusivas de Francia. /
La organizadora del Baile de Debutantes se formó en psicología infantil en la Universidad de la Sorbona de París, antes de que una amiga que admiraba su talento para la organización de eventos la convenciera de que trabajando en relaciones públicas
le pagarían «por hacer lo que yo ya hacía gratis», según confesó en una entrevista con el ‘Daily Mail’.
Fue entonces cuando convenció al grupo hotelero Crillon para que le hiciera un contrato de un año para organizar sus eventos.
Y el resto ha sido historia. De comenzar con una simple libreta de contactos ha conseguido crear un prestigioso evento internacional por el que han desfilado estrellas de cine o miembros de la realeza.
Cristina y Victoria Iglesias Rijnsburger en el Baile de Debutantes de 2019. /
Pero no todo ha sido un camino de rosas. «He tenido experiencias desagradables. Incluso me han ofrecido sobornos», admitía al diario británico. Sorprendentemente, una persona que no le resultó difícil fue la legendaria
editora de ‘Vogue’, Anna Wintour,
cuya hija, Bee, acudió al baile hace unos años. «Anna fue una experiencia positiva para mí», afirma. «
Soy mala con la gente que conspira, pero no soy mala con la gente que es sincera. Creo que, bajo la superficie, es muy tímida. Sé que mucha gente la detesta, pero aprendí mucho de ella. Por ejemplo, me dijo que las chicas y sus acompañantes debían ser de la misma estatura. Yo no lo había pensado».
El momento que lo cambió todo en el Baile de Debutantes
No fue la participación en Le Bal de alguien de sangre azul la que dio el impulso definitivo al evento. En el año 2000 una de las debutantes fue
Lauren Bush, sobrina del expresidente de los Estados Unidos, George W. Bush, que por entonces acababa de llegar a la Casa Blanca.
Lauren Bush, este verano en París. /
Ophélie reconoce que la presencia de Lauren marcó el momento en que el baile se convirtió en un fenómeno mundial. Y también le sirvió a la joven para conseguir un contrato con Tommy Hilfiger, lo que la convierte en una de las muchas chicas cuyas carreras como modelos se han lanzado en
el Baile de Debutantes
.
Es comprensible. Las jóvenes, en su mayoría adolescentes de 16 a 22 años, lucen piezas de las joyerías más importantes y
flamantes vestidos de alta costura prestados por firmas como Chanel, Dior, Lacroix o Carolina Herrera. Y la amplia cobertura mediática, amplificada por las redes sociales, se encarga del resto.
Su gran habilidad para tratar con la gente con la que entra en contacto consiste en ser respetuosa, pero no aduladora,
persistente pero no prepotente, dicen de ella los que la conocen bien. Aunque su creación se ha convertido en un gran evento internacional, Ophélie nunca ha perdido de vista su auténtico objetivo: «que las chicas y sus familias pasen una velada memorable y recordar que estamos ahí para recaudar fondos para la beneficencia».