Régimen impide al pastor Alain Toledano entrar a la Isla para visitar a su hija enferma de cáncer
MIAMI, Estados Unidos. – El pastor protestante cubano Alain Toledano Valiente denunció que el régimen de La Habana le ha prohibido regresar al país para estar junto a su hija mayor, quien padece un cáncer de mama avanzado y será sometida nuevamente a cirugía.
Exiliado en Estados Unidos desde 2022, Toledano calificó la prohibición como un castigo político y exigió públicamente el respeto a su derecho de entrada a Cuba.
En un mensaje publicado en su perfil de Facebook el lunes 12 de mayo, Toledano expresó: “Esta mañana me llega oficialmente la información de que mi hija, Susana, tiene que volver a la mesa de operaciones. Su vida ciertamente está en riesgo una vez más. Estoy haciendo este video precisamente para que le llegue a todos los que están en la silla del poder en Cuba. Que se dejen de jugar a la política, deben dejar de estar jugando con la vida de los cubanos y con el derecho de los cubanos… Es mi derecho exigir entrar a mi país y poder estar con mi familia”, clamó.
El líder religioso, quien pertenecía al Movimiento Apostólico —una red cristiana protestante que el gobierno cubano nunca ha legalizado— fue forzado al exilio junto a su esposa y sus hijas menores tras recibir un ultimátum de la Seguridad del Estado el 25 de junio de 2022: abandonar el país en 30 días o enfrentar prisión prolongada. En julio de ese año, pudo bajar a Estados Unidos.
Sin embargo, sus dos hijas adultas, por motivos de edad, no pudieron acompañarlo y permanecen en Cuba. Poco después, en agosto de 2022, Susana Toledano Benítez fue diagnosticada con cáncer. Según ha explicado su padre, los tratamientos y operaciones previas no han logrado contener la enfermedad. A ello se suman las carencias del sistema de salud cubano. “Su estado, como el de muchos otros, se ha agravado por la escasez crónica de medicamentos en la Isla”, indicó.
Desde su salida del país, Toledano ha intentado regresar sin éxito. Ha sido bloqueado en múltiples ocasiones en el aeropuerto de Miami, donde las aerolíneas le impiden abordar vuelos hacia Cuba. De acuerdo con información que ha recibido, la Dirección de Seguridad del Estado —adscrita al Ministerio del Interior— mantiene una orden oficial de no admisión en su contra.
La negativa también le impidió asistir al funeral de un familiar cercano. “A mí me mueve mi familia”, insistió el pastor en su mensaje, reiterando que no tiene causas penales pendientes y que la prohibición responde exclusivamente a su rol como líder religioso independiente.
Anna Lee Stangl, directora de Incidencia Política de la organización CSW (Christian Solidarity Worldwide), condenó la medida y pidió al gobernante Miguel Díaz-Canel y al ministro del Interior, Lázaro Alberto Álvarez Casas, que revoquen la restricción por razones humanitarias.
“El Gobierno cubano aparentemente no está satisfecho con haber obligado al exilio a Alain Toledano Valiente, a su esposa y a sus dos hijas menores. Las autoridades continúan castigándolo a él y a su familia por el delito de haber liderado un grupo religioso que el gobierno se negó a registrar, separándolos por la fuerza incluso en momentos de crisis”, afirmó Stangl.
A mediados de 2024, la Asamblea Nacional aprobó una nueva Ley de Migración que mantiene intacta la facultad del Estado de limitar la entrada y salida de ciudadanos cubanos, una práctica que ha sido aplicada históricamente contra médicos, deportistas, periodistas, militares y, especialmente, disidentes políticos y religiosos.
El caso de Toledano se suma al de otras figuras a quienes también se les ha impedido regresar a Cuba, como la curadora Anamely Ramos González y la académica Omara Ruiz Urquiola, en un patrón sostenido de represalias contra quienes el gobierno considera incómodos o críticos.