Trump regresa al escenario mundial en la reapertura de Notre-Dame en París
El presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, sonríe a la multitud durante la 146a Conferencia General y Exposición de la Asociación de la Guardia Nacional de los Estados Unidos en el Centro de Convenciones Huntington Place el 26 de agosto de 2024 en Detroit, Michigan.
Emily Elconin | Getty Images Noticias | Imágenes falsas
El presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, regresa al escenario mundial el sábado para unirse a los líderes en la reapertura de la Catedral de Notre-Dame en París, todavía un ciudadano privado pero que ya se prepara para abordar una serie de crisis internacionales.
Es el primer viaje de Trump al extranjero desde que ganó las elecciones presidenciales hace un mes y podría ofrecer al presidente francés Emmanuel Macron la oportunidad de desempeñar el papel de mediador entre Europa y el impredecible político estadounidense, un papel que el líder francés ha disfrutado en el pasado.
El avión de Trump aterrizó en el aeropuerto parisino de Orly poco antes de las 06:00 GMT del sábado, informaron medios franceses.
Se espera que ambos se reúnan al margen de la visita del sábado. Si bien no se ha anunciado una agenda para sus conversaciones, a los líderes europeos les preocupa que Trump pueda retirar la ayuda militar estadounidense a Ucrania en un momento crucial de su guerra para repeler a los invasores rusos.
Macron es un firme partidario de la alianza de la OTAN y de la lucha de Ucrania, mientras que Trump siente que las naciones europeas deben pagar más por su defensa común y que se necesita un acuerdo negociado para poner fin a la guerra de Ucrania.
«El señor Macron está repitiendo su enfoque personalizado que tuvo un éxito limitado durante el primer mandato del señor Trump. Macron sabe que el señor Trump aprecia enormemente la pompa, las circunstancias y la grandeza del Estado y se lo proporciona en abundancia», dijo Heather Conley. Asesor principal de la junta directiva del Fondo Marshall Alemán, que promueve los vínculos entre Estados Unidos y Europa.
Trump se unirá a docenas de líderes mundiales y dignatarios extranjeros para la ceremonia de reapertura de la Catedral de Notre-Dame, cinco años y medio después de que fuera devastada por un incendio.
No estaba claro si Trump se reuniría con otros líderes además de Macron. El equipo de transición de Trump no respondió a una solicitud de detalles.
Si bien Trump prestará juramento como presidente de Estados Unidos recién el 20 de enero, ya ha mantenido conversaciones con varios líderes mundiales, y los miembros de su equipo están tratando de ponerse al día sobre un creciente número de crisis mundiales, entre ellas Ucrania y Medio Oriente.
El asesor de seguridad nacional de Trump, Mike Waltz, y el enviado para Ucrania, Keith Kellogg, se reunieron el miércoles en Washington con el enviado para Ucrania, Andriy Yermak, lo que generó especulaciones de que una reunión entre Trump y el presidente de Ucrania, Volodymyr Zelenskiy, podría estar a la vista en París.
Trump, un republicano, estaba en el poder cuando Notre-Dame ardió en 2019. Perdió su candidatura a la reelección de 2020 ante el demócrata Joe Biden, pero el 5 de noviembre derrotó a Kamala Harris, la vicepresidenta de Biden, para recuperar la presidencia.
«Simbólicamente, tanto la presidencia del Sr. Trump como Notre-Dame han sido restauradas aproximadamente en el mismo período de tiempo. Su visita a París es también la salva inicial de su regreso al escenario mundial, disminuyendo aún más los últimos días de la administración Biden». dijo Conley.
La esposa de Biden, la primera dama Jill Biden, representará a Estados Unidos en la reapertura de Notre-Dame.
Espectáculo mundial
Trump generará muchos rumores en todo el mundo al estar junto a otros líderes mundiales. Visitó Francia cuatro veces mientras fue presidente entre 2017 y 2021, incluidas las ceremonias de aniversario del Día D en 2019.
«Trump será visto en todo el mundo en una posición potencialmente parecida a la de un estadista», dijo el estratega republicano Doug Heye.
«No son imágenes de él en Mar-a-Lago», dijo Heye, refiriéndose a la casa de Florida donde Trump ha pasado la mayor parte de su tiempo desde las elecciones.
«Este es el evento más grande del mundo y estará en igualdad de condiciones con otros líderes».
Los observadores observarán cómo interactúan Trump y Macron. Los dos hombres han sufrido altibajos en su relación a lo largo de los años.
Macron invitó a Trump al desfile militar del Día de la Bastilla en París en julio de 2017, un espectáculo que inspiró a Trump a ordenar su propio desfile militar en Washington para conmemorar el Día de la Independencia de Estados Unidos en 2019. Trump recibió a Macron en una cena de estado en la Casa Blanca en 2018, pero Un año después, los dos se pelearon por los comentarios que hizo Macron sobre el estado de la OTAN.
«La llegada de Trump a París es un ‘buen golpe’ de Emmanuel Macron», dijo Gerard Araud, ex embajador de Francia en Washington. «Es indispensable tener una relación directa con el único hombre que cuenta en la administración Trump, el propio Trump».
Macron, a quien le quedan poco más de dos años como presidente, adoptó un enfoque de no confrontación hacia Trump durante el primer mandato de este último, con la esperanza de que al dialogar con él podría obtener concesiones. Pero a medida que pasaron los años, las decisiones políticas sobre el clima, los impuestos y sobre Irán en particular causaron fricciones entre los dos líderes. Al final la relación fue más conflictiva.
Lo más probable es que se avecinan enfrentamientos, alimentados por el deseo de Trump de imponer amplios aranceles a Europa y otros socios comerciales de Estados Unidos, y el desacuerdo sobre cómo manejar el conflicto entre Ucrania y Rusia.