Real Madrid: Tan sencillo como poner a Bellingham en su sitio
El Madrid se ha sacudido la crisis liguera de un plumazo, recortando cinco puntos al Barça en dos partidos. No hay duda de que el toque de atención de Ancelotti ha funcionado, como tampoco es casualidad que la mejoría del Madrid haya coincidido con la llegada de la mejor versión de Jude Bellingham. Tan sencillo como dejar de hacer cosas raras y poner a cada jugador en su sitio. El inglés es el principal beneficiado del cambio de sistema, jugando en la punta del rombo del centro del campo.
La prueba de fuego del Madrid, no obstante, será en Anfield, pero el equipo empieza a tener otra cara pese a las lesiones. El Madrid ha recuperado el ánimo y Ancelotti, que no había parado de buscar soluciones en todo el curso, ha descubierto también que no pasa nada por tirar de la cantera y por rotar de vez en cuando. Asencio firmó otro gran partido y Güler y Ceballos demostraron que puede dar mucho al equipo. Solo hay que ponerlos.
Cada minuto de Güler es oro
Cuanto más juega menos se entiende el ostracismo al que le tiene sometido Ancelotti durante la mayor parte del curso. Güler fue titular en Butarque y volvió a demostrar, como casi siempre, que es un jugador diferencial. De sus botas nacieron las acciones más espectaculares del partido y con su capacidad de asociación dio otro aire al ataque del equipo blanco. Rozó uno de los goles de LaLiga con un eslalon en banda que acabó con un disparó al que respondió de manera espectacular Dmitrovic.
Su fútbol merece mucho más minutos y su encuentro ante el Leganés debería tener continuidad en los próximos duelos. No hablamos de ser titular indiscutible, pero sí de jugar con regularidad.
Bellingham se empieza a parecer a Bellingham
El inglés sigue subiendo su nivel y se empieza a parecer al futbolista que deslumbró la temporada pasada. Jude fue el faro de la BMV, jugando por dentro y encontrando siempre la rendija con la que contactar con Vini y Mbappé. Fino y elegante con el balón, sigue sin escatimar en su despliegue físico y de su presión nació el primer gol del Madrid, con un robo de balón en la frontal del área.
Los goles ante Osasuna y con su selección han devuelto el ánimo a un futbolista clave para el Real Madrid, que volvió a ver puerta ante el Leganés.
Mbappé se escora a la izquierda
En plena búsqueda de su mejor versión, Kylian Mbappé jugó más que nunca por la banda izquierda. El francés intercambió la posición de nueve con Vinicius, que la temporada pasada ya demostró que podía rendir por el centro. El cambio no le sentó mal al equipo, aunque ninguno de los dos firmó el partido de su vida. Eso sí, el 0-1 llevó la firma de ambos, con el pase de Vini (el primero que le da) y el gol de Kylian, que había visto cómo al inicio del partido le habían anulado un gol… por fuera de juego.
Valverde nunca falla
Fede se puso el brazalete de capitán y se marcó un partidazo en una posición que no le gusta, la de lateral derecho. Pero Valverde nunca pone mala cara y se deja la vida juegue donde juegue. Al final, en una situación de emergencia en la banda derecha, no hay mejor solución que la del uruguayo, que además coronó su partido con un golazo de falta. El soldado más leal de Ancelotti repetirá en ese puesto en Anfield.
Asencio se gana jugar en Anfield
Segundo partido de Asencio en el Madrid y segundo partido consecutivo con la puerta cero, quedando demostrado una vez más que no pasa nada por confiar en la cantera. El equipo no ha notado en absoluto la incursión del futbolista del Castilla, que se ha ganado ser titular en Anfield. Ante el Liverpool se le exigirá mucho más que ante Osasuna y Leganés, pero la única manera de saber si realmente vale es poniéndole. Por ahora, demuestra que está preparado para ser jugador del Madrid.