Fallece Waldo Díaz-Balart, reconocido artista cubano, a los 93 años
MIAMI.- El artista cubano Waldo Díaz-Balart, figura destacada del arte abstracto geométrico, falleció en Madrid pocos días antes de cumplir 94 años. La noticia fue anunciada a través de un comunicado emitido por su familia y compartido por el congresista Mario Díaz-Balart.
“Es con gran tristeza que anunciamos el fallecimiento de Waldo Díaz-Balart, el reconocido pintor y escultor cubano. Conocido artísticamente como Waldo Balart, sus más de seis décadas de contribuciones a la práctica del Arte Concreto le valieron una amplia aclamación y reconocimiento”, expresa el comunicado familiar. Su obra ha sido exhibida a nivel mundial y forma parte de las colecciones permanentes de prestigiosos museos de arte contemporáneo.
“Le estamos eternamente agradecidos por enriquecer e inspirar profundamente nuestras vidas, y lo extrañaremos profundamente”, concluyó su familia en el comunicado.
Nacido en Banes, Cuba, en 1931, Díaz-Balart se estableció en España tras desarrollar una carrera internacional que lo llevó a Nueva York en la década de 1960, donde formó parte de la vibrante escena artística de la ciudad. Su enfoque en la abstracción geométrica fue reflejo de su firme creencia en la libertad, alejándose de lo figurativo por considerarlo anclado al pasado.
Además de su legado artístico, Díaz-Balart fue conocido por su relación con figuras históricas de Cuba. Fue cuñado del fallecido dictador Fidel Castro, ya que su hermana Mirta Díaz-Balart fue la primera esposa de Castro. Sin embargo, su visión política lo llevó a distanciarse del régimen castrista y a exiliarse en el extranjero. En diversas entrevistas, expresó su deseo de una Cuba libre, donde los ciudadanos pudieran forjar su propio destino sin imposiciones. A lo largo de su vida, mantuvo una postura crítica hacia la dictadura cubana.
En una entrevista publicada en Cubanet en 2021, Díaz-Balart también rememoró episodios clave de su vida, como la noche del 31 de diciembre de 1958, cuando se encontraba en La Habana y tuvo que huir tras la caída del gobierno de Batista, logrando salir del país el 1 de enero de 1959.
“Entendí que mi propia vida peligraba, corrí a mi casa (en donde vivía en esa época con mi hermano Rafael, en Alturas de Miramar), la desmantelé y como sabía que me buscarían me refugié en casa de un pariente mío por parte de los Balart, con quien no podían asociarme”, contó entonces el artista a este medio.
“Poco después, supe que Raúl Castro preguntó por mí y cuando le dijeron que estaba en Estados Unidos respondió: ‘Menos mal que no está aquí porque yo no hubiera podido hacer nada por él’”, añadió refiriéndose al peligro que representaba Fidel Castro para su familia.
La entrevista posteriormente quedó compilada en el libro “Como el ave fénix: 50 historias de Cuba en exilio”, del escritor William Navarrete que recientemente fue presentado en Miami.