En huelga de hambre el preso político Manuel de Jesús Rodríguez García
El preso político Manuel de Jesús Rodríguez García permanece en huelga de hambre en una celda de castigo en la prisión Kilo 5 ½, de Pinar del Río, de acuerdo con información de Cubalex.
La madre de Manuel de Jesús Rodríguez, Nilda García Fleitas, denunció que el pasado 8 de febrero tras la visita familiar, su hijo recibió su bolso de víveres completamente destruido.
«Al protestar por esta situación, fue golpeado por los guardias mientras estaba esposado y luego lo encerraron en régimen de castigo. Además, se le fabricó un falso delito de desacato. Rodríguez García inició una huelga de hambre desde el propio día de los hechos», explica Cubalex.
En declaraciones a Martí Noticias, García Fleitas manifestaba: «Sabiendo la situación que tiene el país, el hambre, la miseria y la necesidad que hay, que no hay comida, que no hay corriente y que los padres nos sacrificamos para llevarles las cositas a nuestros hijos y que ellos las cojan y se las destruyan y las boten, esa no es respuesta para darle a una madre, eso es un crimen».
La madre del preso político denunció además que «el director de la prisión, el mayor Eliecer Díaz Rodríguez, intentó forzarla a firmar un documento que culpaba al propio recluso de destruir sus pertenencias, lo cual ella rechazó».
@presospoliticosdecuba#Urgente Denuncia 🇨🇺 🚨 La madre de Manuel de Jesús Rodríguez, ex preso político y miembro de Cuba Primero, con el corazón roto denuncia que su hijo está en huelga de hambre y la comida que le enviaron fue destruida. pic.twitter.com/ARkjIBLuOr
— ProActivo Miami (@ProactivoM) February 18, 2025
En 2016, Rodríguez García fue condenado a ocho años de prisión por delitos como desacato, atentado, ultraje sexual y difamación de instituciones y organizaciones, así como de los Héroes y Mártires. Tras cumplir más de siete años en prisión, fue liberado bajo libertad condicional.
Manuel de Jesús Rodríguez García es miembro de la Alianza Democrática Pinareña y de la iniciativa Cuba Primero. En marzo del 2024 le fue revocada la condicional. Regresó a la cárcel por un delito de desacato, debido a sus publicaciones críticas contra la dictadura.
Cubalex concluye su nota reiterando que «los abusos contra los presos políticos en Cuba forman parte de una política sistemática de represión dirigida a castigar su activismo. Estas violaciones incluyen golpizas, aislamiento en celdas de castigo, privación de atención médica, negación de beneficios penitenciarios y la fabricación de cargos falsos».