Tus espermatozoides ganan «turbo» cuando te recuperas de un episodio de estrés
El estrés afecta de manera integral a todo el cuerpo. Una de las células que lo resienten son los espermatozoides, aunque los médicos no están seguros de cómo o en qué medida. Una nueva investigación de la Universidad de Colorado ha llegado a una conclusión inesperada: la recuperación tras un evento estresante puede potenciar el movimiento de los espermatozoides a través de su paso por el útero y mejorar las posibilidades de fecundación.
Para medir la eficiencia de un espermatozoide, los científicos miden su capacidad de desplazamiento a través de tracto reproductivo femenino para llegar a un óvulo. Este potencial de movimiento se llama motilidad espermática. Para evaluar la fertilidad de un macho, los científicos observan el nado, la calidad del espermatozoide y su nivel de concentración por mililitro de semen.
Investigadores del Campus Médico Anschutz de la Universidad de Colorado descubrieron que la motilidad de los espermatozoides mejora después de un evento estresante. De acuerdo con el reporte publicado en Nature Communications, el fenómeno ocurre porque se presentan cambios en las vesículas extracelulares, una estructura que se libera de manera natural de las células. Con ello, los espermatozoides adquieren un beneficio en su respiración mitocondrial, el proceso con el que obtienen una parte de su energía.
La mejora no ocurre durante el periodo de estrés sino tras superarlo
«Imagina que tienes un coche que tiene dificultades para subir una colina empinada. Cuando el motor está estresado, el automóvil se vuelve menos eficiente. Sin embargo, con un poco más de gasolina, puede aumentar el rendimiento general para una conducción más suave. Al igual que su automóvil se vuelve más eficiente bajo estrés, con los ajustes adecuados, las células mejoran su producción de energía y movimiento cuando los factores inducidos por el estrés están presentes», explicó Nickole Moon, primer autor del artículo y estudiante de CU Anschutz.
Para llegar a esa conclusión, el equipo estresó las vesículas extracelulares de los espermatozoides tanto en hombres como en modelos de animales macho. En ambos casos, los espermatozoides aumentaron su capacidad de nado y su respiración mitocondrial. La investigación puntualiza que el impulso ocurrió después del evento de estrés, una vez que el sujeto lo superó, y no mientras lo padecía.
En vista de los resultados que se asemejan en modelos animales y seres humanos, los científicos proponen que la mejora puede ser un mecanismo de afrontamiento universal de todas las especies. Así, probablemente, los machos producen espermatozoides más eficientes para mejorar la oportunidad de tener descendencia en el marco de periodos estresantes que podrían poner su vida en peligro. La ventana de impulso será estudiada a profundidad para encontrar si además presenta diferencias en el desarrollo fetal.
La crisis de la fertilidad
En abril de 2023, la OMS publicó el estudio más amplio realizado hasta la fecha sobre infertilidad humana. Los datos de la organización estiman que una de cada seis personas experimenta problemas de infertilidad en algún momento de su vida. Además, en 50 años la concentración espermática se redujo de 101 millones de espermatozoides por mililitro a 49 millones, según un estudio publicado en 2022 en la revista Human Reproduction Update.
La ciencia tiene algunos sospechosos para abordar el fenómeno de la disminución en el conteo o calidad del semen. El exceso de peso en un hombre está relacionado con la calidad del fluido seminal, aunque de momento no es posible decir que la conexión sea causal. También ha encontrado que un mayor uso del teléfono se vincula con una menor concentración de espermatozoides en el fluido. Otros factores estudiados son la contaminación ambiental, el consumo de sustancias estimulantes, el tipo de dieta, salud de la persona o desajustes hormonales.