China avanza hacia la energía limpia con Linglong-1, el primer minireactor modular comercial del mundo
China ha puesto en marcha su «banco de energía nuclear» para alcanzar sus metas de carbono. En la provincia de Hainan, al sur de China, el reactor Linglong-1 (ACP100) opera en las instalaciones de Hainan Nuclear Power Co. Ltd. (HNPC). Se trata del primer minireactor nuclear modular de uso comercial en el mundo, desarrollado por la Corporación Nuclear Nacional de China (CNNC), y pieza clave del XIV Plan Quinquenal del país (2021-2025) para el desarrollo de tecnologías nucleares avanzadas.
Linglong-1 es un reactor de agua a presión de tercera generación, con derechos de propiedad intelectual completamente chinos. En 2016, se convirtió en el primer minireactor del mundo en superar una revisión de seguridad del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), lo que le valió el apodo de “banco de energía nuclear”.
Actualmente, Linglong-1 se encuentra en su fase de instalación más intensiva, mientras avanzan paralelamente diversas tareas de depuración de sistemas. Según informes de HNPC, ya se están llevando a cabo los preparativos para las pruebas funcionales en frío, paso previo a su puesta en marcha operativa.
“Este es otro hito en la senda de innovación nuclear independiente de China, tras el éxito de Hualong One. Linglong-1 llena un vacío tecnológico nacional y ofrece una solución china para el desarrollo global de reactores modulares pequeños”, afirmó un representante de HNPC a Global Times.
A diferencia de las centrales nucleares tradicionales, los reactores modulares pequeños (SMR, por sus siglas en inglés) destacan por su tamaño reducido, construcción modular, diseño integrado y sistemas de seguridad pasiva. Estas características permiten una mayor flexibilidad de implementación, mayor seguridad, plazos de construcción más breves y aplicaciones versátiles. Son ideales como fuentes de energía limpia y distribuida, especialmente en parques industriales, zonas mineras o regiones con alta demanda energética, donde también pueden suministrar calor industrial o servicios de climatización.
Cada unidad Linglong-1 genera 125.000 kilovatios, con una producción anual estimada en mil millones de kilovatios-hora, suficiente para abastecer a 526.000 hogares (aproximadamente un millón de personas). Esta energía evita la emisión de 880.000 toneladas de dióxido de carbono al año, el equivalente a plantar 7,5 millones de árboles.
Los reactores SMR
Los reactores modulares pequeños (SMR, por sus siglas en inglés) funcionan con el mismo principio básico de fisión nuclear que los reactores convencionales, pero están diseñados para encajar en un paquete compacto y altamente integrado. En lugar de levantar estructuras gigantescas y complejas, todo el núcleo, los intercambiadores de calor y los sistemas de control suelen fabricarse en fábrica como módulos estandarizados que luego se ensamblan en el sitio.
El resultado es un bloque de reacción que ocupa quizá una fracción del espacio de un reactor tradicional de gigavatios, lo que reduce radicalmente los tiempos y costos de construcción.
Dentro de cada módulo, el combustible nuclear—normalmente pastillas de óxido de uranio—se agrupa en conjuntos que, al iniciar la fisión, liberan calor. Ese calor se transfiere a un fluido (agua ligera, helio a alta presión o incluso sal fundida, dependiendo del diseño) que a su vez genera vapor. El vapor hace girar una turbina conectada a un generador eléctrico, produciendo electricidad.