España se la juega con las amarillas
El próximo viernes, la selección española conocerá su rival para los cuartos de final de la Liga de las Naciones y el posible cruce de semifinales. España será cabeza de serie y jugará en marzo la vuelta en casa. Croacia ya es segura segura una de de las posibles rivales. Las otras saldrán del desenlace entre Francia e Italia y Países Bajos y Hungría.
A Copenhague llegó España con cuatro apercibidos y en marzo entrará con siete a pesar de que Mikel Oyarzabal está de vuelta a casa tras ser amonestado en el Parken. No es que la selección viera muchas más amarillas, porque sólo sumó la de Morata, pero sí se espera que esté de vuelta jugadores que ya han visto una amarilla en esta fase de clasificación. Son los casos de Lamine Yamal, Ferran y Le Normand.
Los de Luis de la Fuente aseguran el primer puesto del grupo tras ganar a Dinamarca en un partido en el que se marcharon lesionados Zubimendi y Baena
España tendrá a siete jugadores en zona de riesgo para los cuartos de final, porque es en esa ronda cuando se limpian las tarjetas de la Nations, o bien cuando cada selección acaba su competición en el torneo. A esos tres casos se suman los de Morata, Ayoze, David Raya y Dani Olmo, cuatro jugadores que ante Suiza, en el caso de jugar, estarán en situación de riesgo de perderse la ida de los cuartos.
El seleccionador ha sido claro en ese aspecto desde el inicio. No quería plan alguno de limpieza de amarillas, algo que en el Parken se podía haber planteado con el 0-2. Pero De la Fuente es de los entrenadores que prefiere la naturalidad del juego y buscar las soluciones una vez que se plantean los problemas, no antes. Él mismo está a una amarilla del castigo después de que en Belgrado fuese amonestado por reclamar una amarilla por un derribo a Joselu en el área.
Durante la fase de clasificación, la selección ha vista a dos de sus jugadores cumplir el ciclo de amonestaciones. El primero fue Carvajal y ahora es Oyarzabal. Además, sufrió la expulsión de Le Normand, que vio la roja directa a los 20 minutos del partido en Ginebra. España no sufría una expulsión desde septiembre de 2019 (Diego Llorente en Bucarest) y no se quedaba con 10 en una primera parte desde septiembre de 2007 (Xabi Alonso, el Reikiavik).