Un intento por solucionar la paradoja del gato de Schrödinger
La paradoja del gato de Schrödinger, uno de los problemas más complejos de la mecánica cuántica, podría haber sido finalmente resuelta. Proponiendo hoy una posible nueva teoría de por qué el famoso gato aparece siempre en un único estado una vez observado, se encontraban físicos teóricos de la Universidad Autónoma de Barcelona, España, según los cuales la explicación se basa en gran medida en la suposición de que cada posibilidad de un sistema cuántico constituye en sí misma un universo, concepto conocido como la teoría de los muchos mundos. Los detalles se publicaron en un estudio en la revista Physical Review X.
La paradoja del gato de Schrödinger
En 1935, el físico austriaco Erwin Schrödinger describió un experimento mental, la paradoja del gato de Schrödinger, en el que se coloca un gato en una caja en circunstancias tan especiales que, según las leyes de la física cuántica, resulta imposible saber si está vivo o muerto. Los llamados estados del gato (vida o muerte) son por tanto superposiciones cuánticas típicamente frágiles y fugaces, en las que un objeto puede estar en varios estados y es imposible saber cuál ocupa realmente. En otras palabras, los ocupa todos simultáneamente.
Interpretar la incertidumbre
Aunque las combinaciones de estados de las partículas se ven forzadas a una serie de destinos posibles sobre el papel, no existen como absolutos físicos ni siquiera cuando nadie las observa. Un intento de dar sentido a esta distinción en la realidad, es decir, al hecho de que el tiempo y el espacio que podemos observar no son la única realidad posible, consiste precisamente en imaginar todas las posibilidades de estados de las partículas como igualmente válidas, cada una de las cuales representa su propio universo. De estos muchos mundos, solo uno se cruza en el nuestro cuando se encuentra con nuestra vasta red de posibilidades establecidas, ganándose el derecho a ser considerado «real».
Una posible solución
La nueva propuesta se basa en el concepto de que cada posibilidad de un sistema cuántico constituye un universo. En concreto, los físicos han supuesto que, dada la complejidad del universo que rodea al gato de Schrödinger que incluye la caja, los observadores, el edificio en el que se encuentran y mucho más allá, las interacciones rápidamente crecientes entre un entorno y los estados vivo y muerto en el tiempo hacen que ambos no aparezcan simultáneamente.
De hecho, esta fusión de mundos se produce a un nivel tan pequeño y con tanta rapidez que relativamente pocas partículas pueden suavizar rápidamente la confusión de un estado indeciso, haciendo que la neblina cuántica casi desaparezca a menor escala. «Dado que los objetos cotidianos contienen enormes cantidades de partículas, esto explica por qué el multiverso no es directamente perceptible para nosotros», escriben los autores en el artículo.
¿Problema resuelto?
Aunque la nueva teoría nos ayuda a visualizar la elección de un único estado entre un abanico de innumerables posibilidades, la explicación se basa en el supuesto de que, de existir, todos los universos se comportarían así. Por tanto, no se puede descartar la posibilidad de que la combinación adecuada de estados entrelazados pueda producir una mezcla de gato vivo y gato muerto. Además, sigue sin resolverse la cuestión de cuánta aleatoriedad cuántica puede ejercer una influencia en una realidad macroscópica como la nuestra.
Artículo originalmente publicado en WIRED Italia. Adaptado por Mauricio Serfatty Godoy.