Fallece en Miami el propagandista del castrismo Max Lesnik
MIAMI:-Este sábado, a los 94 años, falleció en Miami el periodista y activista político Max Lesnik Menéndez, una figura polémica dentro del exilio cubano por su inquebrantable defensa del régimen de La Habana mientras residía cómodamente en Estados Unidos. La noticia fue confirmada por su hija, Vivian Lesnik, a Radio Miami Today.
Nacido en San Antonio de las Vueltas, Villa Clara, en 1930, Lesnik se involucró desde joven en la política cubana como miembro de la Juventud Ortodoxa, un movimiento que denunciaba la corrupción en la Cuba republicana. Fue entonces cuando conoció a Fidel Castro, con quien mantuvo una relación de amistad con altibajos, pero nunca dejó de respaldar su legado.
Aunque en sus inicios se opuso al golpe de Estado de Fulgencio Batista y apoyó la Revolución, pronto se distanció del régimen castrista al percibir su deriva totalitaria. Sin embargo, su “oposición” no lo llevó a un verdadero rompimiento, sino que encontró la manera de mantenerse como un aliado externo del castrismo. En 1961, se exilió en Miami, donde pasó décadas defendiendo al mismo sistema que forzó al exilio a cientos de miles de cubanos.
En 1968, Lesnik fundó la revista Réplica, desde donde promovió el acercamiento con el régimen de Castro y atacó constantemente a la comunidad exiliada, calificando de “extremistas” a quienes denunciaban la represión en la isla. Su postura le valió críticas y enfrentamientos, pero él persistió en su discurso de que los disidentes eran “asalariados de Washington”, alineándose con la narrativa oficial del castrismo.
Lesnik no solo fue un vocero del régimen, sino que mantuvo una estrecha relación con altos funcionarios cubanos y viajó frecuentemente a La Habana, mientras desde Miami impulsaba campañas para el levantamiento del embargo y defendía las políticas represivas del castrismo. Como líder de la Alianza Martiana, una organización que promovía el discurso oficialista cubano, acusó a Estados Unidos de injerencismo pero jamás cuestionó la represión del régimen contra la oposición interna.
Su muerte fue lamentada por figuras vinculadas al gobierno cubano, entre ellas Gerardo Hernández Nordelo, exespía de la Red Avispa, quien declaró en redes sociales: “Acaba de fallecer en Miami el patriota Max Lesnik”. Para la dictadura cubana, Lesnik fue un aliado incondicional; para el exilio, un colaborador del castrismo que jamás reconoció el sufrimiento de los cubanos que escaparon de la opresión que él defendía.
También el propio Miguel Díaz-Canel, Primer Secretario del Partido Comunista de Cuba y Presidente de la República, expresó sus condolencias y elogió a Lesnik como un defensor inquebrantable del régimen. A través de un mensaje en X, escribió:
“Nuestras sentidas condolencias a su hija Vivien y otros familiares y amigos de Max Lesnik, martiano irreductible que acaba de fallecer en Miami. Por su defensa de #Cuba y la normalización de relaciones con #EEUU, sufrió el terrorismo anticubano, sin rendirse jamás”.
Su presencia en Miami, la capital del exilio cubano, siempre fue vista como una contradicción. Mientras miles de cubanos huyeron del comunismo, Lesnik aprovechó la democracia y la libertad de prensa estadounidenses para defender a quienes las destruyeron en su país de origen.